Home

País

Artículo

Roberto Angulo, economista y consultor | Foto: Dinero

CANDIDATOS

¿Cuáles son los principales retos sociales del nuevo gobierno?

Los dos últimos presidentes de Colombia lograron mantener una línea en política social que le permitió al país reducir la pobreza multidimensional durante los últimos 16 años y cerrar algunas brechas. Estos son los desafíos sociales del nuevo presidente de la República.

5 de junio de 2018

El próximo 17 de junio se definirá en segunda vuelta electoral al presidente de la República para el periodo 2018-2022 y recibirá a un país que está empezando a implementar el acuerdo de paz con las Farc, se recupera económicamente tras la desaceleración global de los últimos años y también logró avanzar socialmente.

Si bien algunos de los programas que le permitieron al país avanzar en la reducción de la pobreza se iniciaron con el gobierno de Álvaro Uribe Vélez (2002-2010), fue su sucesor, Juan Manuel Santos (2010-2018), quien aceleró el cambio social del país al modificar programas como el de Familias en Acción y ampliar su alcance, y crear programas como Jóvenes en Acción y la política de vivienda para los más necesitados y estratos del 1 al 3.   

Fue así como en el 2013 Colombia logró por primera vez en su historia que la proporción de clase media superara el índice de pobreza y que pese a la desaceleración económica de los últimos años, la pobreza rural siguiera disminuyendo y la monetaria pasara del 37% al actual 26,9%.

Recomendado: ¿Colombia podrá ponerle fin a la pobreza?

Pero dicho indicador sigue siendo alto y Colombia, que es el único país de la región que en los últimos años sigue logrando disminuir sus índices de pobreza, necesita continuidad y mejoras en su política social. El reto es para el nuevo gobierno.

Roberto Angulo, economista y consultor, explicó que si bien el país tiene disparidades en el desarrollo social, pues todavía Chocó y La Guajira están lejos del avance de los demás departamentos, la pobreza multidimensional logró disminuir rápidamente durante los últimos años no solo por los ingresos adicionales de la exportación del petróleo sino por las políticas públicas en salud, formalización laboral, educación y vivienda.

En ese sentido, el principal reto de cualquiera de los dos candidatos presidenciales será entender la política pública y social, que el país mantuvo durante los últimos 16 años, para conservar lo que funciona de esta y mejorar lo que se deba.

Las posibilidades

Pese a las quejas del sistema de salud, este es uno de los factores que más ha influido en la caída de la pobreza multidimensional. Si bien el sistema nacional requiere ajustes y mejoras en el funcionamiento de las EPS, la atención a pacientes y la solvencia económica, su cobertura nacional ya alcanza el 94% y definitivamente el modelo actual ayudó a conectar la periferia del país.

Puede interesarle: ¿Por qué el Índice de Pobreza Multidimensional se desaceleró?

En este punto, las propuestas de los dos candidatos son totalmente contrarias. Por un lado, Gustavo Petro propone eliminar las Entidades Prestadoras de Salud (EPS), pero no tiene una explicación de cómo las reemplazaría y no reconoce que durante su periodo como alcalde de Bogotá la pobreza multidimensional disminuyó en gran medida gracias al mismo sistema que planea desaparecer.

Angulo advirtió que, incluso si Petro propusiera una EPS estatal, podría tratarse del mayor golpe al sistema de salud ya que el Estado apenas está intentado llegar a las zonas rurales más lejanas, que se mantenían aisladas por el conflicto interno y se vería en problemas al no encontrar un intermediario que le ayude en dicho proceso.

Por su parte, el candidato Iván Duque propone mantener las EPS pero aplicarles algunos cambios. Dichas modificaciones aún no están claras y deberían tender a estimular el crecimiento de las EPS con mejor atención y la desaparición de aquellas que no le cumplen a los pacientes.

Sea cual sea el camino que se elija, lo cierto es que un retroceso en el sistema de salud podría aumentar el índice de pobreza, disminuir nuevamente la población de clase media e incrementar los índices de mortalidad, advirtió el economista.

Otro reto para el nuevo gobierno será la implementación de los acuerdos de paz. Si bien todavía no hay estudios que lo confirmen, la pobreza rural disminuyó durante la desaceleración económica del país al tiempo que inició el postconflicto, mientras que la pobreza urbana se estancaba.

Puede interesarle: Una persona sale de la pobreza si vive con $8.354 al día

Angulo explicó que, aunque se necesitan estudios que lo comprueben, es posible que una de las razones sea que en la ausencia de conflicto, las familias rurales tuvieron la posibilidad de diversificar sus ingresos al acercarse a las zonas urbanas más cercanas para obtener empleo y otras alternativas de ingreso.

Aquí también los candidatos a la presidencia son disímiles. Mientras el candidato Gustavo Petro asegura que cumplirá los acuerdos y generará las condiciones necesarias para evitar un nuevo conflicto al garantizar la presencia institucional y conectividad de las regiones, el candidato Iván Duque señala que le hará modificaciones a los acuerdos pero su propuesta es incierta.

En la ruralidad también será un reto el acceso y conectividad de las poblaciones más aisladas, para lo cual será necesario mantener los programas de atención a la Primera Infancia, Familias en Acción que el presidente Santos rediseñó para aumentar su cobertura y funcionalidad, vivienda gratis o subsidiada y garantizar la atención también a la juventud mediante programas como el de Jóvenes en Acción, algo que debería generar mayor movilidad social y por esta vía consolidar la clase media.

Y en la misma línea, la educación rural y superior también será un reto  para el nuevo gobierno. Aquí se debe evaluar el costo y efectividad del programa Ser Pilo Paga para hacerle mejoras y garantizar que más jóvenes tengan acceso a la educación superior, no solo en universidades privadas por lo que las instituciones públicas necesitarán más atención y convertirse así en una oferta de valor para los próximos estudiantes.

Por último, el nuevo gobierno también tendrá un reto en la atención a la clase media, ya que esta requiere programas sociales que le permitan consolidarse como tal.

Por ejemplo, es necesario que la política social tenga una conexión con el mercado laboral en especial de quienes apenas están iniciando su vida profesional y acelerar los cambios en el territorio. Es importante que el país continúe el avance en la infraestructura más allá de las vías de Cuarta Generación, que son un gran y necesario esfuerzo pero no suficiente.

Recomendado: El 1% de los más ricos acumulan el 82% de la riqueza mundial en 2017