Un balance más positivo

En un mundo cada vez más tecnológico y globalizado, la formación académica parece no ser suficiente. Cada vez se vuelve más urgente enseñar a los estudiantes las llamadas habilidades blandas que incluyen la creatividad, la empatía o la capacidad de trabajar en equipo, para mencionar algunas. Estas aptitudes no solo son importantes a la hora de buscar empleo, también son la base para tener una sociedad mejor.

Aunque mucho se ha debatido sobre si esas habilidades son innatas o se pueden aprender, el sistema educativo nacional cada vez está más comprometido en trabajar en su formación, en especial en una sociedad como la colombiana, que requiere que sus ciudadanos sientan el dolor del otro (lo que se ve hoy con las protestas en las calles) y tengan claro que no pueden aceptar la corrupción en ningún nivel.

Pero son precisamente las asignaturas de ciencias sociales y ciudadanas las que muestran los resultados promedio más bajos del país, medidos por las pruebas Saber 11.

Este año la calificación media de los 14.000 colegios evaluados en esa materia fue de 45,3 sobre 100.

El ranking que hace anualmente esta revista, usando los puntajes por colegio que publica el Icfes en las cinco materias que se evalúan en las Saber 11, muestra que la calificación promedio en ciencias sociales y ciudadanas es de 50 en los colegios privados y de 43 en los oficiales.

Una evidencia adicional de la enorme brecha que existe entre los dos tipos de educación básica y media que se ofrece en el país y en donde la mayor corbertura la tienen los colegios públicos. La diferencia la hace la calidad de los docentes, el presupuesto de cada colegio y la cantidad de alumnos en el aula.

No obstante, entre los más de 9.000 colegios públicos que fueron evaluados en las pruebas Saber 11 de este año hay varios que brillan con luz propia y que ratifican su buena calidad. Entre ellos sobresale la Institución Educativa Distrital Alexander von Humboldt, de Barranquilla, que se consolidó como el mejor colegio público del país y ocupó el puesto 126 en el ranking general.

El Liceo Integrado de Bachillerato de la Universidad de Nariño (puesto 129) y el bogotano Liceo Colombia, que forma parte de los liceos Patria del Ejército (puesto 194).

Así mismo, 3.320 colegios públicos registran un promedio superior al nacional en las pruebas Saber 11 de este año, que fue de 48,2 sobre 100.

Formando ciudadanía

Aunque se pensaría que el trabajo del Gobierno y de las Secretarías de Educación se relaciona solo con los colegios públicos, los privados también tienen mucho que aportar para mejorar la educación en el país y para crear mejores ciudadanos.

Por esta razón, la presente edición de los mejores colegios destacó aquellos que lideran en los 12 primeros municipios que aparecen en el ranking.

Sobresale Bogotá con 40 colegios en los primeros 100 lugares. Allí el número uno es el Liceo Campo David, ubicado al sur de la capital, y que además es el número uno entre todos los colegios del país de calendario A.

Santander y Cundinamarca clasificaron 9 colegios en el Top 100. En el primer departamento están los puestos 2 y 3 del escalafón nacional: el Nuevo Cambridge y la Quinta del Puente, ambos en el municipio de Floridablanca.

En Cundinamarca, por su parte, se destacan un colegio de Sopó (Campoalegre) y otro de Chía (Gimnasio el Hontanar).

El cuarto departamento con más colegios en los 100 primeros lugares es Bolívar, que clasificó 7 y entre ellos lidera el Gimnasio Cartagena Aspaen.

Norte de Santander, Caldas, Quindío, Casanare y Cauca clasificaron un colegio en ese selecto grupo, donde estuvieron ausentes colegios de Guajira, Cesar, Magdalena, Córdoba, Sucre, Nariño, Chocó y los antiguos territorios nacionales.

Los 100 primeros colegios del ranking son todos privados y mayoritariamente de calendario B, así que se podría decir que son los que educan a las élites, razón de más para que demuestren lo que están haciendo para formar mejores ciudadanos.

Varios apadrinan otros colegios o trabajan con las Secretarías de Educación para implementar o mejorar programas que buscan nivelar a todos los estudiantes por lo alto.

El país necesita cada vez más personas educadas con calidad. Las cifras muestran parte de los problemas que tiene el mercado laboral. Según un estudio de Fedesarrollo, 21,7% de la población no terminó bachillerato y 17,3% ni siquiera acabó la primaria, al tiempo que 29,6% de las vacantes ofrecidas son para universitarios y 27,7% para bachilleres. Una brecha enorme que no está siendo llenada.