FMI: Países pierden 30% del gasto en infraestructura por ineficiencias

Sin embargo, el informe dice que la inversión en infraestructura pública será fundamental en la recuperación de la economía de los países después de la pandemia.  

Para esto, los gobiernos deberán saber cómo ejecutar bien el gasto y conocer cuáles son los proyectos apropiados para invertir, pues los recursos con los que cuentan las naciones son limitados.

Para lo anterior se requiere una buena administración por parte de los gobiernos en cuanto a la infraestructura, "con instituciones y marcos sólidos que planifiquen, asignen e implementen bien la ejecución de las obras", destaca el informe.   

Además de hacerse frecuentemente, la inversión pública se encarece y así mismo su calidad baja, lo que lleva a que los beneficios que traen los proyectos sean limitados.  

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Esto también aumenta las oportunidades de corrupción, demoras en entregas y ejecución, así como los sobrecostos en proyectos grandes. "Una sólida gobernanza de la infraestructura es clave para reducir este desperdicio", dice la entidad. 

De acuerdo con el FMI, si se libera el potencial de inversión, este sector podrá tener un papel importante mientras los países se van recuperando de las consecuencias de la pandemia.

Adicionalmente, explica que "las pérdidas de eficiencia y el despilfarro de recursos en infraestructura se pueden evitar".  

Estimaciones de la entidad muestran que "más de la mitad de estas pérdidas podrían compensarse mediante una mejor gobernanza de la infraestructura". 

Inversión hacia el futuro

El documento del multilateral asegura que tras la pandemia, los países tienen la oportunidad de “construir un puente hacia el futuro a través de una infraestructura pública bien diseñada e implementada”. 

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De hacerse bien, la inversión pública puede impulsar un crecimiento que adopte a más personas, reduzca la desigualdad y genere oportunidades para los ciudadanos.

También destaca que se puede mejorar la vida de las personas, conectar mercados y mejorar la resiliencia de los países frente al cambio climático y pandemias futuras, a través de inversión en sistemas de salud, infraestructura digital y consciencia ambiental, por lo que se debe subir la inversión pública para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), "mientras que las economías más avanzadas se tienen que ocupar del envejecimiento de la infraestructura como carreteras, puentes y sistemas de salud". 

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“Cada dólar gastado tiene que contar, y cuando gastan más en infraestructura, los países también necesitan gastar mejor y de manera más inteligente para sacar el máximo provecho del dinero”, explica el informe del FMI.