“Mi mayor logro todavía no lo he hecho”: vocalista de Iron Maiden

Cuando tenía cinco años, la legendaria estrella de rock Bruce Dickinson tenía un casco de bombero, una capa de superhéroe y la escalera de su camarote. Con un pequeño carro de bomberos, pasó con esperanza por las casas de al lado de la suya pensando que podría rescatar personas en algún incendio y que le pagarían por eso. Ese, considera, fue su primer fracaso empresarial.

Con 60 años, el vocalista de la banda Iron Maiden, tiene una riqueza estimada en US$115 millones, que lo ubica entre los vocalistas más ricos del mundo. Pero además de dedicarse a la música, también es piloto, esgrimista, escritor, presentador de televisión y todo un empresario que invierte en diferentes industrias.

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Es el presidente ejecutivo de Cardiff Aviation Limited, una exitosa compañía de mantenimiento aeronáutico que fundó años después de haber quebrado con otra firma. También participó en la creación de la cerveza Trooper, que llegó a vender más de 2 millones de pintas en 40 países. Sin embargo, aclara lo siguiente: “Mi mayor logro todavía no lo he hecho”.

¿Si es una legendaria estrella de rock, por qué insiste en ser empresario?

“Porque es divertido. Si lo vieras de otra manera, te sientas en la bahía, ves a una estrella de rock perezosa y no hace nada. ¡Me aburro! Quiero decir que es divertido porque mi cerebro está activo, me gusta crear. Me gusta crear canciones, me gusta crear empresas, para que se creen puestos de trabajo, para que se creen servicios para las personas y, a veces, nuevas tecnologías y nuevas ideas”, le dijo a Dinero en Bogotá, mientras se alistaba en su camerino para hacer una conferencia ante más de 1.200 personas que participaron del TigoUne Business Forum.

El cantante no dejó que le tomaran fotos, pero fue amable al hablar con este medio. Dejó claro que no tiene planes de retirarse. De hecho, acaba de terminar tres intensos meses de 38 conciertos con la gira ‘The Legacy of the Beast Tour’ por Europa, que culminó con un concurrido espectáculo en el The O2 Arena de Londres, que se tuvo que repetir dos veces.

Dickinson también acaba de anunciar que la próxima presentación agendada, por el momento, será en Sudamérica, al llegar por cuarta vez al festival Rock in Rio en Brasil el 4 de octubre de 2019.

Hablando de negocios, recalca todo el tiempo que las compañías deben convertir sus clientes en fanáticos, como los que tienen las bandas de rock.

“Cualquier compañía que quiera ser exitosa tiene que tener una relación con sus clientes. En el caso que compres un Tesla, es mejor que creas que estás teniendo una buena relación con esa compañía y que te sientas especial. De lo contrario, saldrás a decir que tuviste una mala experiencia con ese carro y no te sentirás importante al haber hecho esa adquisición, aquí que irás por el camino a comprar otra cosa”, sostiene el británico. 

Pero más contundente es al hablar del futuro que se asoma, dominado por tecnologías emergentes como la inteligencia artificial.

“Es bastante difícil tener relaciones con la gente, ya que en lo relacionado con la economía digital no hay seres humanos involucrados y, por supuesto, eso es un problema. Es un problema porque a las empresas digitales les encanta hacer ahorros al deshacerse de los seres humanos, pero lamentablemente, a los seres humanos les gusta interactuar con seres humanos”, señaló en la entrevista.

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Y agregó: “Entonces, ¿cómo humanizo la economía digital? Es muy difícil. Mi argumento es que se tendrá que avanzar con un sistema híbrido; de lo contrario, ¿qué papel desempeñarán los seres humanos, sentados y sin hacer nada? Para que sepas que la economía no se trata solo de hacer dinero, se trata de hacer que la sociedad funcione de la misma manera que el dinero funciona”.

El vocalista de Iron Maiden cree que la inteligencia artificial será un lado oscuro “y es algo con lo que tenemos que convivir”. Desde su perspectiva, algo que no se debe perder es la tecnología sirviendo a seres humanos.

“Estamos sirviendo a seres humanos, no a la inteligencia artificial. Todo está ahí para que sus vidas sean más fáciles y mejores. Hay en cambio personas que pasan toda su vida creando inteligencia artificial, lo que es realmente estúpido”, precisó.

El artista y empresario no recuerda cuál era la situación en Colombia la última vez que estuvo en el país, pero sí comparte la percepción que tiene ahora.

“Creo que simplemente es algo así como que frenaron la guerra con los que estaban en la selva y habrían dejado de dispararse unos a otros. Lidiar con las consecuencias de un tratado de paz lleva algunos años. Eso lo quiero decir porque en Inglaterra e Irlanda del Norte todavía estamos lidiando con el hecho de que las organizaciones terroristas dejaron de volar a los policías pero en lugar de eso se convirtieron en mafiosos y ahora son narcotraficantes. Es casi lo mismo, porque a menudo financiaban actividades terroristas con robos a bancos y demás, así que ¿cómo van a ganarse la vida de la misma manera?. Por eso lo que se necesita es un tiempo para resolver esto. Tienen que seguir adelante con el proceso más que cualquier cosa, creo que Colombia tiene un futuro fantástico”, aseguró Dickinson.

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