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TURISMO

‘Einstein’: otro tipo de turista que Colombia está buscando

El turismo científico podría ser una de las “fórmulas” que tiene Colombia para potenciar este sector y convertirlo en el nuevo petróleo de la economía, como lo quiere el presidente, Iván Duque.

11 de septiembre de 2018

Un viajero puede desarrollar esta clase de actividad cuando su visita al país le genera un nuevo conocimiento. Según Colciencias, Colombia tiene un enorme potencial para desarrollar el turismo científico de naturaleza, el cual se centra en el descubrimiento del territorio, sus ecosistemas, modos de vida y un patrimonio (cultural y natural), todavía por investigar.

La biodiversidad es la herramienta más potente a favor de convertir al país en un destino atractivo para científicos, biólogos, antropólogos, investigadores y académicos, quienes podrían llegar a engrosar los datos que por divisas le deja esta actividad al país. El año pasado el monto fue de US$4.698 millones, dato que representó un incremento de 7,4% frente a 2016.

Cifras de Procolombia indican que National Geographic, reconocidas universidades internacionales y viajeros independientes interesados en la geografía, biodiversidad y la cultura colombiana, ya gastan hasta US$340 por día para hacer turismo científico.

Para potenciarlo se creó una mesa de apoyo interinstitucional con centros de investigación, representantes de la academia, comunidades y miembros del sector público y privado, para planificar e implementar estrategias que aporten al desarrollo de este producto con potencial en el país.

El objetivo del equipo de trabajo, creado en octubre de 2017, es transformar un modelo tradicional de turismo masivo en uno reflexivo, responsable y con impactos positivos en el entorno, mediante un modelo de negocio con un eje ambiental responsable de la gestión del conocimiento, otro encargado del diseño, desarrollo del producto y la oferta turística, y un eje social que responda a procesos participativos como capacitaciones técnico-científicas, educativas, de aprendizaje y operacionales.

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De esta iniciativa forma parte Colciencias, que junto a Procolombia,  el Instituto Von Humboldt, el Instituto Sinchi, las universidades Javeriana, de los Andes y Externado, además de la red global de turismo comunitario Travolution Ecoturism Consulting, trabajan para determinar un proyecto piloto que brinde una base sólida para la implementación de este tipo de turismo.

Julián Guerrero, vicepresidente de turismo de Procolombia considera que el disfrute de la naturaleza no está solo en contemplar un hermoso paisaje sino en comprender cuáles son los procesos biológicos y cómo funcionan los ecosistemas.

“El turismo científico permite este tipo de disfrute que profundiza en el conocimiento de los entornos y las especies. Colombia siendo uno de los países más biodiversos del mundo tiene un gran potencial para el turismo científico que, además de ofrecer experiencias únicas y memorables, es de alto valor agregado y genera ingresos superiores al del turismo tradicional”, manifiesta. 

Mario Murcia, representante de Colciencias en la mesa de trabajo indica que a partir de Colombia BIO, el proyecto estratégico de interés nacional que busca fomentar el conocimiento, conservación, manejo y aprovechamiento sostenible de la biodiversidad en el país a través de la cienciase comenzaron a tomar decisiones en torno a hacer un mejor manejo y aprovechamiento de la misma.  

Si bien en otras partes del mundo el turismo científico se enfoca más en temas de astronomía, física, entre otros, en Colombia el turismo científico de naturaleza, es el que brinda las oportunidades.

Se está trabajando para adecuar esa oferta que implica, además de los sitios específicos, toda la infraestructura hotelera, los asuntos logísticos y de transporte, etc. Es importante generar toda una dinámica de mercado alrededor de los lugares. Son diversas las posibilidades, por ejemplo, el Aviturismo permite el desarrollo del turismo científico, pues habrá quienes quieran investigar sobre especies determinadas de aves.

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“Asociado al turismo científico también está la creación de centros de ciencia, que son lugares en donde se hace la interpretación del conocimiento como los museos, zoológicos o jardines botánicos. Por ejemplo, en Risaralda estamos desarrollando un centro de ciencia con enfoque en aves y lo que se busca es hacer la sonoteca de todos los cantos de las aves que se tienen, generar el registro de la información y que esto contribuya a armar la cadena de turismo”, dice Murcia.

“La Universidad del Externado se ha dedicado a organizar la oferta y demanda para este tipo de turismo, lo que se requiere para la participación social y para empoderar a las comunidades en este tema a nivel metodológico. El potencial de este nicho es enorme por la megadiversidad que existe en el país, lo que permitirá ayudar a las comunidades para que se organicen y produzcan un impacto positivo en sus departamentos”, explica María Luisa Galán, representante de la institución educativa.

Trabajan en promoción

De acuerdo con el informe de Prestadores de Servicios Turísticos del Programa de Transformación Productiva (2015), en el país existen 1.926 turoperadores colombianos de excursiones educacionales y científicas que, aunque trabajan productos enfocados en naturaleza, no necesariamente se promocionan entre viajeros de este nicho.

Entidades internacionales o turistas independientes con una afición en particular (ya sean biólogos, investigadores o antropólogos), viajan a Colombia llamados por su cultura, tradiciones y gran biodiversidad para hacer desde rescate, siembra y liberación de tortugas en Bahía Solano, hasta expediciones por todo el país para conocer la geografía colombiana.

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Native Colombia, es el turoperador que facilita el tema de liberación de tortugas, en el corregimiento de El Valle, del municipio de Bahía Solano, en Chocó.

Allí los viajeros pueden hacer avistamiento de tortugas, especialmente entre julio y noviembre. “Se está promoviendo conciencia ambientalista, dándole un valor agregado a la visita de los turistas a Colombia incentivándolos a conservar especies en vía de extinción. Es una labor de conservación”, precisa Alexander Monsalve, gerente de esta compañía.

Este lugar es visitado por turistas provenientes principalmente de España, Estados Unidos y Francia. Una de las debilidades que encuentra Alexander Monsalve es que muchos profesionales no están encaminados a este tipo de actividad, pues muchos están en otras áreas y campos laborales y no precisamente el turismo.

Mario Murcia, de Colciencias, destaca el trabajo realizado, por ejemplo, en Boyacá en donde se montó el programa Boyacá Bio, haciendo uso de recursos de regalías. Ya les aprobaron la construcción de un Jardín Botánico y ya han invertido alrededor de $30.000 millones, pues es un proyecto que se ha cohesionado el Plan Departamental de Desarrollo.

Lo propio pasa en otros departamentos como Nariño, lo que hace prever que con mayores incentivos y una política definida en la materia, en el mediano plazo podrían empezar a verse resultados más concretos en este tipo de turismo.