Ecopetrol vender o no vender el 8,5%

El presupuesto de la Nación para este año asciende a $259 billones de los cuales al menos $7,1 serán financiados por el recaudo que se logre por cuenta de la ley de financiamiento que se aprobó en los últimos días de diciembre. Sin embargo, el abultado presupuesto de este año que creció 10% frente al año pasado sigue desfinanciado en al menos $8 billones, puesto que el Gobierno, a pesar de no haber conseguido la aprobación inicial de la ley de financiamiento, no ha efectuado modificaciones al presupuesto para 2019.

Ahora con el fin de “cuadrar la caja” para los compromisos consignados en el presupuesto actual, el Ministro de Hacienda propone hacer la venta de 8,5% de Ecopetrol, que valga la pena decir ya esta aprobada desde el año 2006 cuando se autorizó la democratización de la empresa. El defecto de esta nueva posible ronda de venta no tiene que ver con las autorizaciones para hacerlo, esta relacionado es con la conveniencia de la venta de otra parte del principal activo de la Nación y el uso que se va a dar a los recursos que se logren obtener. Igualmente, por ahora no está claro si para el Estado es más rentable vender ese 8,5% adicional o conservarlo; si vende logra liquidez en el corto plazo, pero pierde los dividendos a largo plazo que puede percibir por esa participación.

También es necesario analizar si es mejor la venta de otras participaciones de la Nación como Colombia Telecomunicaciones, o en empresas financieras como la Previsora o la democratización de una parte del Banco Agrario que llevaría a fortalecer el gobierno corporativo de esa entidad. Todos esos análisis deberían ser aportados por el Gobierno hasta el final de febrero cuando vence el plazo para entregar al Congreso el plan de enajenación de activos, solo de esa manera se puede confiar que las decisiones al respecto son las más convenientes para las arcas públicas.

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Vender cualquier activo de la Nación con el fin de conjurar un descuadre financiero es a todas luces errado, mucho más cuando el presupuesto de funcionamiento, que es puro gasto, aumentó considerablemente pasando de $146,6 billones a $160,2 billones. Ese aumento del 9,3% luce enorme frente a la inflación que cerró en 3,2% en 2018, la estrechez fiscal actual, y un ambiente externo con incertidumbre relacionada a Estados Unidos, el crecimiento de China y el Brexit en la Eurozona.

El otro aspecto que se deberá tener en cuenta para esa operación será determinar el valor de la empresa. Si bien ya existe la autorización para que se venda ese 8,5% adicional de Ecopetrol, la autorización de venta no incluye el precio al que se puede realizar, y no se puede usar el precio en bolsa como precio base para la venta porque los precios bursátiles no reflejan necesariamente el valor fundamental de la empresa. La cotización de la acción ha presentado una elevada volatilidad en los últimos meses conforme los precios del petróleo Brent mostraron una marcada desvalorización desde los primeros días de octubre cuando alcanzaron la cota de US$86 por barril.

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Siendo Ecopetrol una empresa integrada, con operaciones de exploración y producción, refinación, transporte y comercialización, el precio adecuado para cualquier movimiento de venta de acciones debe salir de un proceso de valoración de los tres segmentos mencionados que generan el valor de la empresa, el precio correcto será la suma del valor de esas tres partes, no un precio basado en el precio del petróleo que corresponde únicamente al segmento de producción.

Por último, deseo manifestar un rechazo total al atentado ocurrido el jueves pasado en la Escuela de Cadetes, los colombianos debemos rechazar todos los asesinatos de policías, soldados, estudiantes y líderes sociales. Todos los asesinatos son malos vengan de donde vengan, independientemente de la motivación ideológica o intereses que los originen. Nuestro país merece y necesita alcanzar la paz para lograr el progreso de su sociedad.

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