Por esto, a pesar de Hidroituango, crecieron los ingresos de EPM

A finales de este mes de abril, la emergencia en el proyecto hidroeléctrico de Ituango (Hidroituango) cumplirá un año, convirtiéndose en la situación más compleja y retadora para Empresas Públicas de Medellín (EPM), uno de los conglomerados más importantes de servicios públicos en Colombia.

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La no entrada en operación del proyecto en diciembre pasado, pero además la tensión para determinar en qué circunstancias quedó la casa de máquinas tras el paso durante más de diez meses de las aguas del río Cauca, obligó a EPM a hacer cálculos sobre los recursos que necesitará para los próximos tres años -tiempo que estima la empresa para que Hidroituango empiece a generar-, estimados en unos $7 billones.

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En el corto plazo la contingencia de Hidroituango no permitió que la empresa creciera al ritmo que traía en 2017, cuando obtuvo utilidades históricas. Sus números y sus estados financieros para 2018 mostraron cifras que le permitieron darle continuidad a la operación de sus negocios y, como señaló la empresa en un comunicado, “garantizar la salud financiera”.

EPM, a través de los negocios y filiales, alcanzó ingresos por $16,3 billones, con un crecimiento del 9%; registró un Ebitda de $5,1 billones, 8% superior al de 2017, pero mucho menor al crecimiento que registró en 2017, cuando fue superior al 25%, y un resultado del periodo de $2,4 billones, lo que muestra un incremento del 4%.

“El Grupo EPM generó Valor Agregado por $8,6 billones, aportando así al desarrollo de los territorios en los que tiene presencia. Se destaca que los proveedores de bienes y servicios recibieron $1,4 billones, lo que se refleja en un importante aporte a la generación de empleo y al crecimiento económico”, destacó EPM en su informe.

También resaltó los $216.000 millones que se destinaron a las comunidades y al mejoramiento del ambiente. “Para aportar a una mayor inversión social, en 2018 se pagaron transferencias al Municipio de Medellín por $1,2 billones, que equivale al 55% de la utilidad neta de 2017. En el año 2019, el Municipio de Medellín recibirá transferencias cercanas a $1,3 billones para sus programas dirigidos al desarrollo de la comunidad”, puntualizó la empresa.

Lo que viene

Una vez superado el 2018, el gran reto para EPM viene este año y los próximos, pues tendrá que conseguir $7 billones para atender sus obligaciones y necesidades, originadas por la contingencia de Hidroituango, y mantener los compromisos de deuda sobre Ebitda de 3,5 veces.

Dentro de las estrategias de EPM está contemplada la venta de activos, como la participación que tiene en ISA, del 10,17%; y otros como Aguas de Antofagasta y el Parque Eólico Cururos, ambos en Chile.

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Aunque la junta directiva autorizó la venta de la participación en ISA, EPM decidió suspender el proceso dado que el precio que había fijado en principio de la acción de la empresa de transporte de energía, concesiones viales y telecomunicaciones, podría estar por debajo de las expectativas, dados los resultados de ISA y el crecimiento del valor de su acción que se ubicó en sus máximos históricos, cercanos a los $16.000, cuando se había fijado apenas por encima de $13.000.

EPM está por definir también cómo va el proceso de la venta de los activos en Chile, que sumados a la operación de la participación en ISA, le deberían entregar a ese grupo cerca de $4 billones. Otros $2 billones corresponderán a un aplazamiento de inversiones, cuyos proyectos aún no se conocen; y un billón más por reducción de costos.