Los magníficos
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La irregularidad más evidente con la reforma a la justicia fue lo ocurrido en la comisión de conciliación. Este tipo de comisiones se conforma cuando los textos aprobados por ambas cámaras del Congreso no tienen el mismo contenido. La Comisión queda encargada de darle la estructura final a la norma, que posteriormente se aprueba de manera expedita en las plenarias. Sin embargo, sólo pueden ser incluidos los incisos que hayan sido aprobados en Senado o en Cámara. Las comisiones no pueden reescribir la reforma.
Desde mi punto de vista esta es la más grave irregularidad de todo este escándalo, porque según los medios de comunicación, esta comisión reescribió y agregó artículos. Eso pone en evidencia un interés específico que todavía no ha sido puesto en evidencia. Por incompetencia o mala fe quienes llevaron a dicha comisión esas propuestas estuvieron a punto de lograr su cometido.
Estas personas están en la obligación de poner la cara y explicar por qué llevaron a la comisión de conciliación las propuestas que hoy son motivo de repudio nacional.
Según los medios, los únicos que se opusieron en la Comisión fueron Germán Varón, representante a la Cámara por Cambio Radical (quien sin embargo votó favorablemente la reforma en la plenaria) y Roosevelt Rodríguez partido de la U, quien votó negativamente la reforma en la plenaria.
Juan Manuel Corzo: Presidente del Congreso, Comisión Primera. Conservador. (Foto Archivo Publicaciones Semana)
