Tecnología, la clave para la transición energética de Colombia

Pese a que Colombia es un país de bajas emisiones de efecto invernadero, su paso a energías limpias también será importante para la lucha contra el cambio climático en el mundo y su propio beneficio, si se tiene en cuenta, por ejemplo, que el país es vulnerable a los impactos de este fenómeno.

De acuerdo con el más reciente estudio del Centro Regional de Estudios de Energía (Cree), el país necesitaría una electrificación acelerada y multiplicar por ocho su capacidad de generación energética para cumplir la meta de ser carbono neutral en 2050, si esto se combina con un crecimiento económico a tasas altas.

Sin embargo, dicho proceso -advirtió el Cree- llevaría a un incremento en los precios de la electricidad, que calculó podría multiplicarse por cinco como consecuencia del incremento en su demanda, ya que tanto los hogares como la industria y el comercio tendrían que “electrificar casi la totalidad de sus procesos productivos y cambiar los equipos para hacer el consumo energético más eficiente”.

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Además, el transporte del país tendría “una necesidad de modernización y electrificación de la flota, al tiempo que se requeriría del uso de hidrógeno y biocombustible avanzados”.

Por esta razón, el Cree identificó algunos de los que serían factores claves para facilitar dicha transición. El primero de ellos sería, precisamente, la tecnología “que determinará qué tan rápido disminuirán los costos de generación de las energías renovables y de las baterías de almacenamiento, así como la disponibilidad de tecnologías como captura y secuestro de carbón o el hidrógeno”.

Por otra parte, los expertos destacaron que será importante para el país su capacidad de alcanzar acuerdos “sobre los estándares de los proyectos y de asegurar su legitimidad social, pues sin los acuerdos institucionales requeridos difícilmente podría avanzarse en la ruta de la descarbonización, la sostenibilidad y el crecimiento incluyente”.

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Por otro lado, el Cree destacó nuevamente que, por ahora, seguirán siendo importantes los hidrocarburos en la medida que representan ingresos fiscales que ayudan a costear programas para la reducción de la inequidad en el país.

En ese sentido, la entidad destacó que la ausencia o baja explotación de hidrocarburos representa costos adicionales para el país pues no solo deben importarse, sino que implican inversión en infraestructura para su ingreso y distribución.

Finalmente, Tomás González, director del Cree, señaló que “hay diversos escenarios posibles para Colombia, lo importante es tener en cuenta que en ningún caso hay caminos libres de sacrificios y que la ruta de transición que escoja el país debe tener en cuenta las disyuntivas, los requerimientos y la preparación necesaria para lograrla. Debemos abrir la discusión alrededor de estos tres elementos, es la única manera de hacer una transición energética realista, sostenible y costo-efectiva”.

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