Construcción de edificios urbanos | Foto: Semana.com

PRONÓSTICOS

Infraestructura será la locomotora de aquí al 2022: Fitch

Los economistas de la calificadora Fitch bajaron sus estimaciones sobre el desempeño del sector constructor, tras los resultados del primer semestre de 2019. Infraestructura de transporte y de energía, serán los propulsores de las obras civiles de aquí a 2022.

19 de octubre de 2019

Durante el primer semestre de 2019, la inversión en construcción residencial y no residencial se contrajo bruscamente. El indicador que lleva el Dane sobre este tema cayó 7,2%, lo que a su vez hizo que todo el PIB del sector disminuyera 2,4%. Esta situación, sumada en a una desaceleración en los permisos de construcción, llevaron a los analistas de la calificadora Fitch a modificar a la baja sus proyecciones para esa actividad en el país.

Inicialmente creían que la construcción podría crecer 3,2% en 2019 y 4,8% en 2020, pero ahora calculan que esos avances serán de 0,1% y 3,8% respectivamenteSin embargo, advirtieron que siguen esperando que Colombia se mantenga entre los mercados de mayor crecimiento en América Latina desde 2020 en adelante, con un crecimiento del PIB total promedio de 3,7% anual entre 2020 y 2024.

Les preocupa que mientras las áreas aprobadas para construcción de edificaciones han dado señales de un repunte incipiente, con un aumento de 8,4% anual entre mayo y julio, las destinadas a obras civiles cayeron 23,7%, lo que implicaría que ese sector puede experimentar una desaceleración.

A partir de 2020, en Fitch esperan que el sector de la construcción se beneficie de mejoras en las condiciones macroeconómicas del país, lo que les dará más confianza a los inversionistas ante menores costos del endeudamiento. En la construcción de edificaciones, en particular, los programas gubernamentales para promover la vivienda podrían impulsar la inversión. Sin embargo, los nuevos gobiernos locales podrían limitar el potencial tanto en la construcción residencial como en la no residencial, ya que la incertidumbre sobre la dirección de la política probablemente pesará en las ejecuciones de los proyectos.

En la calificadora aseguran que el desarrollo de infraestructura de transporte será el principal impulsor del crecimiento de la industria de la construcción al menos hasta 2021. En particular están optimistas con los $13,8 billones que se invertirán en la Línea 1 del Metro de Bogotá, recientemente adjudicada al consorcio Apca Transmimetro, compuesto por China Harbor Engineering Company Ltd y Xi’An Metro Co. Ltd.

"Además del Metro de Bogotá, también observamos varios proyectos más pequeños, actualmente en licitación, que impulsarán al sector. Entre ellos se destacan los $1,9 billones del Regiotram de Occidente, un proyecto ferroviario regional que se está promoviendo como una Asociación Público Privada (APP) con el gobierno de Cundinamarca, así como las fases 2 y 3 del Transmilenio en Soacha, que involucra una inversión de $931.000 millones, más $3 billones de la troncal de la Carrera 68 y $993.000 del corredor de la Avenida Ciudad de Cali.

Las obras de los proyectos 4G también serán un motor para el sector de las obras civiles. Estos proyectos han experimentado retrasos sustanciales por factores como la falta de financiamiento, requisitos ambientales, negociación con las comunidades y desacuerdos entre desarrolladores y Gobierno sobre los términos contractuales. "Esperamos que los proyectos avancen con mayor ritmo en los próximos meses, pues habrá más disponibilidad de financiamiento, ya que ahora sí se están dando los cierres financieros", indican en Fitch.

También habrá impulso en la inversión en infraestructura para proyectos de energías renovables, en particular, de 2020 en adelante. Estas obras agregarían 1.874 megavatios de capacidad entre 2019 y 2024, lo que representa 38% de la capacidad de energía que se agregará en el país durante ese período. En particular, esta inversión estará respaldada por el probable éxito de la próxima subasta de energías renovables, programada para el 22 de octubre. Si bien en una subasta anterior realizada en febrero no se otorgó ninguna capacidad, "esperamos que la próxima funcione gracias a una serie de cambios realizados en la regulación de las subastas, lo que aumentará el interés entre las empresas", señalan en Fitch.

En el campo de la infraestructura energética, también hay expectativas por los trabajos de reparación en HidroItuango, que se llevarán a cabo al menos hasta 2022. Si bien la estructura de la presa se completó en junio de 2019, los trabajos continúan para reparar la sala de máquinas. También hay otras obras pendientes que incluyen el sellado completo de los túneles de desviación.

Paralelamente, el sector del agua probablemente sería otra área de inversión para la planta de tratamiento de agua de Canoas en Bogotá. En junio, el gobierno distrital llegó a un acuerdo con la CAR para financiar el proyecto, el cual implicaría una inversión total de US$4,5 billones.