Están jugando con Coljuegos: funcionarios de la entidad dicen que tuvieron que crear un sindicato para defenderse de los atropellos del nuevo presidente. Estos son los graves testimonios

En los últimos días, a la entrada de las oficinas de Coljuegos, en el norte de Bogotá, los trabajadores de la entidad protestan con carteles y arengas pidiendo que se detengan los despidos injustificados de sus compañeros, incluso aquellos que están cubiertos por el fuero sindical. Mientras tanto, Marco Emilio Hincapié, quien llegó a presidir la entidad hace dos semanas, estaría ignorando por completo a los funcionarios.

Coljuegos es una empresa industrial y comercial del Estado, adscrita al Ministerio de Hacienda y encargada de administrar el monopolio rentístico de los juegos de azar. Los multimillonarios recaudos, cercanos al billón de pesos por año, son destinados a la salud, por lo que es clave que cuente con el personal técnico necesario para lograr esos recursos. A pesar de la importancia que tiene, los trabajadores de la empresa estatal temen que la entidad esté siendo manejada con intenciones políticas y que el despido de personas con varios años de trayectoria signifique la contratación de otras sin experiencia.

En conversación con SEMANA, varios funcionarios coinciden en que todo comenzó con la llegada de Hincapié a la presidencia de Coljuegos, movimiento que se concretó el pasado 11 de julio con la posesión del funcionario. La entidad, que estaba en poder del Partido Conservador, pasó a ser dirigida por el exsecretario general de la Colombia Humana y hombre de confianza del presidente. El cambio, que se dio en el marco del rompimiento de la coalición oficialista, trajo cambios abruptos para la planta de personal.

“Desde que el señor Hincapié llegó a la presidencia de la entidad, se han presentado situaciones que han generado muchos traumatismos en el funcionamiento. Desde el primer día se terminaron contratos de trabajo con fundamento en una norma que establece un plazo presuntivo. Genera una gran inestabilidad en los trabajadores. Esta norma no se aplica en ninguna otra entidad del Estado”, contó Luz Mery Rodríguez, secretaria de comunicaciones de Sintracoljuegos, el nuevo sindicato de los trabajadores.

De acuerdo con la trabajadora, 16 funcionarios han sido retirados en menos de 20 días tras varios años de trabajo técnico. El temor impera en las instalaciones de la entidad porque no existe justificación para los despidos.

“Tenemos miedo de que la situación se mantenga hasta que la mayoría del personal sea reemplazado. Además, se han trasladado muchos funcionarios sin justificación alguna, incluso en contra de las necesidades operativas. Se destacan por su profesionalismo y ahora les toca asumir funciones totalmente distintas. Sentimos que lo que intenta la administración es aburrir al personal para obligarlos a renunciar”, agregó la vocera del sindicato.

SEMANA conoció dos notificaciones de terminación de contrato enviadas por el mismo presidente de la entidad y todas se basan en el Decreto 2541 de 1945, el cual dice en un aparte que el contrato de término indefinido o sin fijación de término alguno se entenderá pactado por seis meses. Esto es calificado como “plazo presuntivo”, lo cual le da poder a Hincapié para terminar los contratos cuando considere. “Le informo que el contrato tendrá vigencia hasta el 27 de julio de 2023 inclusive, con ocasión a la expiración del plazo pactado o presuntivo”, dice el oficio de terminación de contrato que Hincapié habría enviado a varios funcionarios.

Incluso, denuncian que se les pidió la renuncia a algunos directivos, a pesar de que están próximos a pensionarse. “Ellos se negaron a presentarla. Con esos movimientos, es claro que el vicepresidente de Desarrollo Organizacional quiere desestabilizar las áreas. A uno se le vence el contrato a fin de mes y cree que lo van a sacar”, le dijo Rodríguez a este medio.

Por esta situación, los trabajadores de la entidad crearon, ante el Ministerio del Trabajo, Sintracoljuegos, un sindicato nuevo para unirse en la lucha por sus derechos y evitar que más personas se queden sin trabajo. “Decidimos crear el sindicato por el drama que se vive. Las personas que se despiden son papás, esposos, hermanos e hijos. Una familia entera se queda sin empleo y en este país es muy complejo conseguirlo”, explicó la vocera.

Sin embargo, denuncian que el presidente de la entidad no está prestándole atención al nuevo sindicato. El martes pasado estaba agendada la reunión de la junta directiva de Coljuegos, con la presencia de funcionarios del Ministerio de Hacienda. Cuarenta trabajadores se pusieron camisetas y mostraron pancartas alusivas de la nueva unión frente a las instalaciones, pero la diligencia se canceló de manera inesperada.

“La reunión fue cancelada por el presidente y por el ministro de Hacienda. No querían que nosotros nos hiciéramos visibles”, aseguró Rodríguez.

Incluso, los trabajadores aseguran que el gerente administrativo retiró las pancartas del sindicato de la entidad por orden del presidente. Hasta el momento, Hincapié no ha atendido las solicitudes de reunión de los directivos de la unión.

“Viola nuestra libertad sindical. Es una vía de hecho contra nosotros. Hincapié ha sido irrespetuoso con nosotros”, afirmó Rodríguez.

Incluso, la funcionaria denuncia amenazas a quienes se oponen a las nuevas directrices con procesos disciplinarios: “Han estado preguntando por los procesos que tenemos y nos han amenazado con que pueden venir más para los miembros del sindicato sin justificación. Puede manchar nuestra hoja de vida”.

La gota que rebosó la copa para muchos fue el despido de Mayra Malkun, fundadora del sindicato. Con el mismo correo, y bajo la excusa del plazo presuntivo, se le notificó a la trabajadora que debía entregar el puesto de inmediato. Esto va en contra del fuero sindical que cobija a quienes forman parte de dichas uniones.

“Nos enteramos de eso en horas de la tarde. Subí personalmente a la oficina del presidente y no fui atendido. Me dijeron que estaba ocupado. Otros funcionarios subieron exigiendo una reunión y tampoco pudieron. Hasta hoy no nos atiende”, expresó Cristian Ariza, presidente de Sintracoljuegos, en diálogo con SEMANA.

Por esta razón, los funcionarios hicieron un plantón frente al edificio hasta horas de la noche, exigiendo sus derechos y que se garantice el buen funcionamiento de Coljuegos. A pesar de esto, Hincapié nunca los atendió ni les dio la cara.

“Me parece preocupante y lamentable que el presidente Petro haya sido elegido con una base de sindicatos grandísima y que hoy se esté enviando el mensaje contrario. Es falta de coherencia, más aún con la defensa de la reforma laboral. En su propia administración no se está poniendo en práctica”, agregó Ariza.

Hincapié le explicó a SEMANA la situación que se vive en la entidad y aseguró que dos personas renunciaron y que a otras siete se les venció el término de seis meses del contrato. Según los trabajadores, él mismo invocó el plazo presuntivo que despidió al personal.

También comparó renuncias y despidos de años anteriores, pero en 2022 el promedio fue de 3,5 al mes. En los días que Hincapié ha estado dirigiendo la entidad, la cifra es más del doble.

Sobre la finalización del contrato de la cofundadora del sindicato, el presidente de Coljuegos aseguró que “obedece a su forma de vinculación con un contrato con término de seis meses”.

“Por otra parte, valoramos que los trabajadores se unifiquen y expresen sus inquietudes y necesidades, buscando diálogo con el empleador, estos espacios propician el mejoramiento de los procesos”, dijo Hincapié.

También aceptó que funcionarios bajaron las pancartas del sindicato, pero dijo que fue porque “obstaculizaba la visión del equipo de seguridad y representaba un riesgo para todos” y que el resto de material se conservó. Además, aseguró que no se le ha solicitado ninguna reunión con representantes de la unión.

Una entidad clave para los recursos de la salud en el país se encuentra atemorizada por posibles despidos injustificados y reprimida por la falta de atención a la unión sindical bajo un Gobierno que dice defender los derechos de los trabajadores. Contando al actual, la entidad ha tenido cuatro presidentes en un año, rotación que preocupa por los casi un billón de pesos que se recaudan en Coljuegos anualmente.