Emprendimiento sostenible: BioPlaza, los Bioneros de la alimentación saludable en Bogotá

Hace 17 años tildaron de loco a Alexander von Löbell por querer, en aquel entonces, involucrarse en un medio del cual se conocía poco y se encasillaba con algo que pertenecía solamente a los ambientalistas y no a todos. Hablar sobre alimentación saludable era extraño en aquel entonces. Así comenzó BioPlaza, una propuesta natural y consciente que cree en la alimentación saludable, un mecanismo para conservar el entorno natural y mejorar los estilos de vida de los consumidores.

Esta columna se la dedico a Alexander y a BioPlaza por dos razones. Hoy, cuando la tendencia del consumo sostenible está más en la mente y en las decisiones de compra de las personas, es necesario resaltar a aquellos que como bioneros (pioneros de lo bio en Colombia), iniciaron esta tendencia. Por otra parte, porque es un ejemplo admirable de emprendimiento sostenible. La constancia, la perseverancia y las ganas por transformar paradigmas hacen de Alexander un emprendedor con el cual vale la pena hablar.

Las conversaciones con Alexander empiezan por un lado y se dirigen a otro. Son así, porque cada anécdota lo lleva a contar otra anécdota. Empieza hablando sobre la sostenibilidad y de repente lo termina envolviendo a uno entre historias sobre la época de la reconstrucción de Alemania en tiempos de posguerra -Alexander es colombo-alemán-. En esa historia me contó cómo el contexto de limitación de recursos de la Alemania de otrora condicionó los hábitos de alimentación de los alemanes y los fue amoldando a lo que hoy ya es cultura y estilo de vida en su país.

Alexander en su versión colombiana también habla sobre la pasión que tiene al ser emprendedor. Entusiasta pero crítico, ve cómo el emprendimiento en Colombia sigue sin despegar, a pesar de las ganas de algunos emprendedores. Si, muy crítico, y cómo no serlo. Cree en la seriedad, la disciplina y la formalización como aquellos factores determinantes para que cualquier empresa en Colombia surja y se mantenga.

El espíritu emprendedor de Alexander y su visión, hacen que hoy BioPlaza sea reconocido en el sector de la agroecología y la alimentación saludable en Colombia. Apoya de manera amplia a aquellos emprendedores del sector rural que están haciendo la tarea bien y de manera consecuente con los principios de la sostenibilidad.

BioPlaza cree en la masificación de la cultura del consumo sostenible. No puede ser solamente para unos pocos que pueden pagarlo, dice Alexander y en ello también coincido yo. ¿Cómo hacerlo? Pues tal y como ocurrió con el celular en su entonces: mayor productividad, economías de escala y presión a la disminución de precios. Al respecto, la innovación es esencial y es la apuesta de BioPlaza en los meses y años venideros.

Con lo ocurrido en la Amazonia en los meses pasados, en donde casi 2,5 millones de hectáreas de selva fueron quemadas en Brasil (en Colombia son casi 180.000 hectáreas que desaparecen anualmente), BioPlaza está convencida de que es la oportunidad para que los consumidores pongan de su parte a partir de sus decisiones de compra. Reducir el consumo de carne, de productos masivos, y sustituirlos por productos orgánicos producidos de manera más local, son algunas de las cosas que desde las ciudades podemos hacer para contribuir a disminuir la presión sobre la praderización que sucede en nuestras selvas.

Todo esto merece un cambio de cultura. Cambio que en América Latina aún no comprendemos: la cultura de la prevención. ¿Cómo logramos evitar mayores enfermedades y costos asociados con la salud? Pues alimentándonos de manera saludable, dice Alexander. La gente sabe que es necesario prevenir, pero no sabe cómo hacerlo y tampoco no quieren soltar lo que les ha gustado mucho, “somos resistentes al cambio”, acentúa este gran emprendedor.

Visitar BioPlaza es algo más que la oportunidad de comprar alimentos orgánicos, saludables y productos naturales. Es la posibilidad de conversar con Alexander en una cátedra de sostenibilidad, de historia y de emprendimiento.

Gracias por las charlas que van y vienen Alexander. Que BioPlaza cumpla 17 años más y muchos más.