Expresidente Bill Clinton reconoció que ofreció a Rusia “una eventual membresía en la Otan”

El expresidente de Estados Unidos Bill Clinton reconoció que durante su mandato (1993 - 2001) ofreció a las autoridades de Rusia “una eventual membresía” en la Alianza Atlántica, que vivía en aquella época un periodo de expansión.

“Le ofrecí a Rusia no solo una asociación especial con la Otan, sino también la perspectiva de una eventual membresía en la Otan, argumentando que nuestros mayores problemas de seguridad en el futuro provendrían de organizaciones no estatales o de Estados autoritarios”, dijo el exmandatario durante una entrevista para la CNN destacada por el portal Politico.

Clinton reveló que trasladó al Gobierno ruso de la época la necesidad de hacer frente “juntos” a aquellos países que “venden capacidades químicas, biológicas y nucleares a grupos terroristas”, a la par que, dice, insistió en que Washington y esa organización no tenían la intención de amenazar a Moscú.

Durante la presidencia de Clinton, países como República Checa, Hungría o Polonia se adhirieron a la Alianza Atlántica, que años más tarde también daría la bienvenida a Bulgaria, Estonia, Letonia, Lituania, Rumanía, todas ellas repúblicas de la Unión Soviética.

Este proceso de expansión ha sido para ciertos sectores uno de los principales argumentos del presidente ruso, Vladimir Putin, para iniciar la invasión Ucrania, al considerar que la Otan habría ganado terreno en los últimos años a Rusia, país que estaría perdiendo presencia internacional.

Sin embargo, Clinton rechazó esta posibilidad y defendió que mientras él fue presidente de Estados Unidos, ese organismo hizo lo correcto”.

“Creo que hicimos lo correcto en el momento correcto. Y si no lo hubiéramos hecho, esta crisis podría haber ocurrido incluso antes”, puntualizó.

España apoya el ingreso de Suecia y Finlandia a la Otan

Por su parte, el Parlamento español ratificó el ingreso de Suecia y Finlandia en la Otan, a pesar de las divisiones sobre la cuestión dentro de su gobierno de izquierda.

“El Pleno del Congreso da su autorización a la firma de los Protocolos al Tratado del Atlántico Norte sobre la adhesión del Reino de Suecia y de la República de Finlandia”, señaló la Cámara Baja española en su cuenta en Twitter.

La cámara, de 350 diputados, aprobó la ampliación de la alianza transatlántica para incluir a los dos países nórdicos por 290 votos a favor, 11 en contra y 47 abstenciones.

La medida fue respaldada por el partido socialista en el poder, aunque su socio de coalición de extrema izquierda, Podemos, se abstuvo.

Este partido ha sido muy crítico con los envíos de armas a Ucrania y no ha ocultado su desconfianza hacia la Otan y su petición de que los Estados miembros aumenten sus presupuestos de defensa.

La invasión rusa de Ucrania en febrero desencadenó la petición de Suecia y Finlandia de unirse a la alianza, poniendo fin a décadas de no alineamiento militar.

Los 30 miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte deben estar de acuerdo para que Finlandia y Suecia sean admitidas.

Según una lista de la Otan, solo cinco países miembros tienen que aceptar todavía formalmente el ingreso de los dos países: República Checa, Grecia, Hungría, Portugal, Eslovaquia y Turquía.

Militarización rusa del Ártico es un “reto estratégico”, según jefe de la Otan

Recientemente, el secretario general de ese organismo, Jens Stoltenberg, declaró la necesidad de reforzar la seguridad en el flanco norte de la alianza para contrarrestar a Rusia.

“El Gran Norte es estratégicamente importante para la seguridad euroatlántica”, dijo tras señalar que la incorporación de Finlandia y Suecia siete de los ocho estados árticos serán miembros de esa organización.

Advirtió que “el camino más corto hacia Norteamérica para los misiles y atentados rusos sería sobre el Polo Norte. Esto hace que el papel del NORAD sea vital para América del Norte y, por tanto, también para la Otan”.

El NORAD es el Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte, una organización de Estados Unidos y Canadá.

Las capacidades de Rusia en el extremo norte “son un reto estratégico para toda la alianza”, dijo Stoltenberg, citando una importante acumulación militar rusa en la región.

Esto incluye, señaló, la reapertura de “cientos de emplazamientos militares árticos nuevos y de la antigua era soviética”, y su uso del Gran Norte “como banco de pruebas para las armas más avanzadas, incluidos los misiles hipersónicos”.

Con información de Europa Press y AFP