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La mesera se quejó por todo el dinero que le deben deducir de su salario.
La mesera fue rechazada por tener síndrome de Down. | Foto: Getty Images / kali9

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“Váyase y llame otro mesero”: menosprecian a mesera por tener síndrome de Down en restaurante de Medellín

En un video publicado vía TikTok se expone lo que ocurrió con la mesera.

Redacción Nación
14 de enero de 2024

A través de un video compartido en TikTok, la propietaria de un restaurante ubicado en el barrio el Poblado, de Medellín, denunció un hecho que le generó una gran molestia junto a los colaboradores que trabajan en su negocio.

En su relato, la mujer expuso un hecho de intolerancia que se produjo contra una mujer que tiene síndrome de Down y que lleva un largo tiempo trabajando como mesera en el restaurante.

La mujer comenta la situación indicando que dicha situación le ha hecho pensar que “la gente es una porquería y me han hecho perder la fe en la humanidad”, posteriormente explica que Natalia (la mujer con síndrome de Down), es una persona “muy atenta, trabajadora y con muchas capacidades para atender”, por ello lleva cuatro años trabajando con ella.

Mesera rompió en llanto por no recibir propina (imagen de referencia).
Mesera rompió en llanto por ser rechazada | Foto: Getty Images / Betsie Van der Meer

“Natalia está encargada de ayudarnos con el servicio a la mesa. Ella es una persona supremamente capaz, ella atiende a las personas, las saluda, les dice donde sentarse, les lleva la carta, les da la bienvenida, ella lleva bebidas, recoge, es una persona es demasiado activa, ella es super tesa”, comenta la mujer en el video.

Intolerancia en restaurante en El Poblado, Medellín

De acuerdo con el relato de la propietaria del sitio, el hecho se produjo cuando un comensal extranjero llegó en compañía de una mujer y la pareja “discriminó a Natalia”.

Natalia los recibió súper querida, como siempre, entonces le dijo: ‘Hola, ¿cómo están, bienvenidos?’, a ella no se lo entiende muy bien a veces cuando habla, pero no pasa nada, la gente pide que le repita y eso es normal”, comentó.

Pese a la buena disposición de la mesera por brindar un buen servicio, la dueña del restaurante señaló que la joven fue despreciada de una mala forma.

Reacciones encontradas generó la queja de una mesera en Argentina (imagen de referencia).
La mesera que fue discriminada lleva varios años trabajando en el restaurante. | Foto: Getty Images / Willie B. Thomas

En el video la mujer explica que la compañera del hombre extranjero le dijo a Natalia que no quería ser atendida por ella y le pidió que viniera otro mesero a tomar su pedido.

“La pelada le dijo: ‘amiga, yo no quiero que usted me atienda, por favor, váyase y llame otro mesero’. Natalia se quedó cómo en shock, cómo que ella no entendía qué le estaba diciendo”, indicó la dueña del restaurante.

Pese al comentario que había hecho la acompañante del hombre extranjero, Natalia nuevamente intentó atender a la pareja, pero una vez fue rechazada de forma ofensiva. Dicha situación causó que la mesera terminara llorando a causa del trato que recibió por parte los clientes del sitio.

“Ella se fue asustadita para donde los compañeros, pero no dijo nada, entonces siguió el servicio normal. Ella después fue a llevarles unas bebidas y la pelada volvió, y le dijo: ‘niña, ¿es que usted no me entendió? No quiero que me atienda, váyase’; entonces Natalia en ese momento se terminó de ‘rallar’ y se fue llorando para donde los compañeros”, agregó la dueña del restaurante.

Agregado a ello, la mujer comentó que la situación con la Natalia fue un hecho que superó a los demás meseros, pues no sabían cómo actuar ante la actitud de la clienta. Sin embargo, uno de ellos decidió atenderles.

Los comensales sobre los que se quejó habían consumido 50.000 pesos argentinos (imagen de referencia de mesera).
Comensales despreciaron el servicio de una mesera por que ella tiene síndrome de Down | Foto: Getty Images / Klaus Vedfelt

Pese a que la pareja recibió un servicio sin problema, la dueña del restaurante advirtió que en su negocio nunca más se va a volver a atender a las personas que traten de mal a Natalia o a cualquiera de su equipo de trabajo.

“Yo se los digo, si aquí vuelve a haber un cliente o una persona que le haga eso Natalia o que insinúe cualquier cosa, tranquilamente le pueden decir a esa persona que muchas gracias y que se retire porque nos reservamos el derecho de admisión, porque a mí no me interesa aguantar eso por una cuenta de 200.000 pesos”, declaró la dueña del sitio.