La promesa rota del presidente Gustavo Petro a una madre que busca a su hijo asesinado en El Salvador

El 10 de diciembre de 2023, a través de su cuenta de X, el presidente de la República, Gustavo Petro, reveló que el Gobierno iba a ayudar para esclarecer el crimen de un ciudadano colombiano que se registró en El Salvador, por las pandillas del país centroamericano. El anuncio fue un bálsamo de esperanza para su madre, Luz Marina Pérez, quien busca despedir a su hijo.

Jhackson Alexis Arias era un joven que, con 23 años, viajó en enero de 2022 a El Salvador, ilusionado por las grandes promesas de prosperidad por cuenta del cuestionado, pero muy popular, gobierno de Nayib Bukele. Según las versiones que las autoridades salvadoreñas le confirmaron a la madre, su hijo tan solo llevando 15 días en el país fue interceptado por las pandillas, al llevar un tatuaje de una calaca.

La figura se la había tatuado por gusto en Colombia hace unos años, pero en el país centroamericano es el símbolo de una pandilla rival de la organización criminal más peligrosa de la nación, la Mara Salvatrucha. Por lo cual, fue asesinado por el grupo y enterrado en una fosa común, la cual aún no ha sido ubicada.

Allá solo estuvo 15 días, porque el 11 de enero de 2022 fue la última comunicación que tuve con él. Me llamó, como todas las mañanas, para darme los buenos días. Como de costumbre, me habló: “Mamá, ya estoy listo, voy a salir, la bendición. La amo mucho”. Fue lo último que supe de él.

Tras dar a conocer el caso en una edición de SEMANA, el mandatario colombiano mostró en sus redes sociales la intención que tenía su administración de dar claridad del caso. “Colombiano habría sido asesinado en El Salvador por una pandilla y arrojado a una fosa común. El Gobierno colaborará en todo con su familia para esclarecer el crimen y recuperar su cuerpo”, manifestó en su momento el mandatario.

Dos meses después, Luz Marina Pérez, madre del joven asesinado, asegura que nunca recibió una sola llamada del Gobierno o alguna comunicación, esto a pesar de la esperanza que se había generado con el trino del presidente en diciembre de poder darle el último adiós a su hijo en su tierra.

“Cuando el presidente se pronunció en el caso de mi hijo, realmente me sentí contenta, sentí como un alivio de saber que por fin el presidente se iba a personar del caso de mi hijo e iba a tener la oportunidad de que el caso se esclareciera. Y yo también pudiera tener más facilidad para poder encontrar y traer el cuerpo de mi hijo de regreso”, contó la madre del joven asesinado a SEMANA.

Pérez asegura que ha sido una gran decepción la falta de atención del Gobierno, que en su momento aseguró que iba a colaborar para esclarecer el crimen y ayudar a repatriar el cuerpo. “Me ha llenado de una gran tristeza al ver que solo fueron palabras y hasta el momento no me ha ayudado de ninguna forma. Ni siquiera he recibido ninguna notificación del Gobierno de alguna ayuda para esclarecer el caso de mi hijo”, manifestó.

Numerosos ciudadanos colombianos están actualmente detenidos en El Salvador, como resultado de la campaña emprendida por el presidente Nayib Bukele contra las pandillas que han sembrado el terror en ese país. Según cifras de la Cancillería, 74 connacionales permanecen encerrados en el país centroamericano. Esta medida ha generado opiniones divididas: algunos la ven como un modelo a seguir, mientras que otros la critican por sus consecuencias negativas.

En respuesta a la falta de acción por parte del Gobierno, un grupo de más de 30 personas se ha congregado en la Plaza de Bolívar en Bogotá, exigiendo ayuda para el retorno de sus familiares detenidos en El Salvador. Los testimonios de los afectados revelan un patrón común: colombianos atraídos por las políticas de Bukele que, tras poco tiempo allí, han sido encarcelados sin pruebas contundentes.