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Se presentan cierres por fuertes lluvias. | Foto: Twitter: @Coviandina

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Habilitada la Vía al Llano tras cierres por derrumbes

El corredor vial que comunica a Bogotá con Villavicencio estuvo cerrado durante toda la noche.

13 de agosto de 2021

Las fuertes lluvias de los últimos días han ocasionado derrumbes intermitentes en la Vía al Llano, por lo que se han realizado varios cierres preventivos.

En la noche del jueves 12 de agosto se presentaron varios derrumbes que obligaron al cierre de la vía por varias horas. Sin embargo, el Instituto Nacional de Vías, Invias, informó que en la mañana de este viernes quedó habilitado dicho corredor.

Los cierres se presentaron en tres partes del camino por deslizamientos de tierra y piedras. El primero de ellos a la altura de El Tablón, en el kilómetro 35 de la ruta. El segundo hacía el peaje de Pipiral, que vale la pena recordar que es una de las zonas del corredor vial con mayores riesgos de deslizamientos, y el tercero en el kilómetro 85, cerca del túnel Buenavista.

Por el momento, la vía fluye en completa normalidad, sin embargo, los servicios de atención en carretera están preparados para atender cualquier emergencia que se presente en los próximos días debido a las lluvias.

La apertura de la vía es clave para este fin de semana festivo ya que el departamento del Meta está trabajando en la reactivación económica y el turismo es uno de los motores de este proceso.

“El Llano no puede estar condenado a la inestabilidad de la vía a Bogotá con la concesión más cara en la historia de este país. Presidente @IvanDuque no existe reactivación sin estabilidad en la vía en esta región!”, publicó en su cuenta de Twitter.

Cierre de la vía

Debido a fuertes lluvias en la noche del jueves 12 de agosto la vía al Llano presentó un cierre preventivo por caída de material en zonas clave. Según informo Coviandina, la afectación se vio del Kilometro 58+00, túnel Renacer. La vía permanece cerrada, sin embargo, se ha venido dando paso controlado por varios minutos.

En la vía se presentó caída de piedras y lodo, por lo que se tomó la decisión de efectuar el cierre preventivo. Según informó Coviandina, algunos usuarios quedaron afectados y a la espera de continuar su recorrido.

Cabe señalar que en los últimos días se han visto bastantes problemas a nivel estructural por las lluvias que se están presentando. Además, las condiciones atmosféricas y oceánicas continúan siendo propicias para que la temporada de huracanes en el Atlántico sea superior al promedio, según informó el Centro de Predicción del Clima de la Oficina NAcional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA).

De acuerdo con el Centro, se espera que el número de tormentas con nombre oscile entre 15 y 21. De estas, entre siete y diez pueden convertirse en huracanes, de los cuales entre tres y cinco podrían alcanzar una categoría igual o superior a tres, es decir, las más destructivas.

“Después de un inicio récord, la temporada de huracanes del Atlántico de 2021 no muestra signos de ceder al entrar en los meses pico que se avecinan”, dijo en un comunicado Rick Spinrad, administrador de la NOAA.

Los científicos de esta agencia estadounidense predicen que la probabilidad de una temporada de huracanes en el Atlántico (2021) por encima de lo normal es del 65 %. Hay un 25 % de posibilidades de que sea casi normal y un 10 % de una temporada por debajo de lo normal.

“Una combinación de condiciones oceánicas y atmosféricas en competencia generalmente favorece una actividad superior al promedio durante el resto de la temporada de huracanes del Atlántico, incluido el posible regreso de La Niña en los meses venideros”, dijo Matthew Rosencrans, pronosticador principal de huracanes estacionales en el Centro de Predicción del Clima de la NOAA.

Según la NOAA, no se espera que las temperaturas de la superficie del mar Atlántico sean tan cálidas como lo fueron durante la temporada récord de 2020; sin embargo, la reducción de la cizalladura vertical del viento y el aumento del monzón en África occidental contribuyen a las condiciones actuales que pueden aumentar la actividad estacional de huracanes.