Primeros‌ ‌días‌ ‌de‌ ‌presencialidad‌ ‌educativa:‌ ‌¿qué‌ ‌opinan‌ ‌los‌ ‌maestros?‌ ‌

Se espera que entre la segunda y tercera semana de julio todas las instituciones educativas estén listas para volver a la presencialidad. Sin embargo, el pasado 6 de julio comenzó el regreso a las aulas en casi todos los colegios oficiales del país. Este ejercicio les sirvió a maestros y directivos en Bogotá, Cúcuta y Buenaventura para organizar el retorno seguro y alternado de los estudiantes; sin embargo, los miembros de la comunidad académica, incluyendo a los padres de familia, aseguran que aún quedan algunos desafíos por resolver.

El regreso a los salones de clase permite que muchos estudiantes puedan completar su proceso de aprendizaje, por eso las instituciones educativas, los docentes y las entidades estatales determinaron algunos lineamientos para utilizar la alternancia como un aliado. Algunos colegios separan a los grupos para mantener el aforo, otros implementan técnicas de limpieza constantes para garantizar medidas de bioseguridad y en otras zonas los maestros trabajan para recuperar la confianza de los padres de familia en las instituciones.

Óscar Ardila es profesor de la institución educativa Alfredo Iriarte en el sur de Bogotá. Luego de conocer el comunicado de la Alcaldía y las exigencias de los entes nacionales, relata que algunos aspectos son difíciles de cumplir. En su primera clase presencial, luego de más de un año de enseñanza virtual, pudo notar que los estudiantes no usan el tapabocas permanentemente y que algunos aún no saben cómo protegerse de manera adecuada: “En este momento no hay un regreso seguro ni siquiera en los grados décimo y once, no porque los colegios no intenten cumplir con los protocolos, sino porque hay estudiantes que no tienen las condiciones para un aprendizaje completo porque en la zona ni siquiera hay acceso a un internet de calidad”, asegura Ardila.

Tatiana Sarmiento, rectora de la institución educativa Santo Ángel en Cúcuta, Norte de Santander, ha recogido las distintas preocupaciones del sector educativo, por eso, con maestros y docentes, acordaron empezar con un plan piloto en preescolar, grado primero, décimo y once, de tal forma que puedan utilizar el retorno a la presencialidad como una herramienta para fortalecer la virtualidad que les permita priorizar a algunos estudiantes con necesidades especiales, alumnos con problemas de conectividad y quienes no han podido completar su proceso de aprendizaje por otras circunstancias. “Esta es la tercera versión del proceso de alternancia, pero creo que podemos llegar hasta la versión 20 porque esto implica realizar ajustes todo el tiempo, revisar, equivocarse y acertar. Para eso necesitamos la confianza de los padres y la serenidad de los docentes”.

De otro lado, Stella Cuero Rodriguez, coordinadora académica de la institución educativa Basco en el barrio Santa Cruz de Buenaventura, Valle, cuenta que los docentes y coordinadores tienen claro que existe una necesidad para regresar a clases, sin embargo, en la Comuna 5 la mayoría de familias presentan dificultades porque los padres de familia manifiestan que no se sienten seguros. “Estamos dispuestos a cumplir los lineamientos del Ministerio de Educación pero se hace necesario articularnos con los padres de familia para solucionar las dificultades de esta y de otras instituciones educativas de Buenaventura”.

Según la ministra de Educación, María Victoria Angulo, el 85 por ciento de los establecimientos educativos del país ya cuenta con las condiciones necesarias para el regreso a la presencialidad, y el 15 por ciento restante todavía necesita algunas semanas para terminar de hacer adecuaciones de infraestructura para ofrecer seguridad a sus estudiantes. Igualmente, se espera que el 15 de julio finalice el esquema de vacunación para maestros y personal administrativo de las instituciones.

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