Yo le dije esta madrugada a las fuerzas armadas que por favor no esperemos actos de generosidad de estos bandidos, rescatemos militarmente a nuestros secuestrados"

Colombia y Venezuela zanjarán diferencias con diálogo: Brasil

Las diferencias entre Venezuela y Colombia no llegarán a extremos y los dos vecinos encontrarán una salida a través del diálogo, dijo el martes el ministro de Defensa de Brasil, Nelson Jobim.

10 de noviembre de 2009

Las tensiones entre los dos países aumentaron en los últimos meses a raíz de una mayor presencia militar estadounidense en territorio colombiano y el presidente venezolano, Hugo Chávez, pidió a los militares prepararse para la guerra.

Colombia respondió anunciado que presentará el caso al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y a la Organización de Estados Americanos (OEA).

"No creo que ocurra absolutamente nada", dijo el ministro de Defensa brasileño tras una reunión en Brasilia con el visitante presidente de Israel, Shimon Peres.

"Nosotros creemos que todo eso puede resolverse con diálogo, conversación. La posición de Brasil siempre es una posición de moderación", agregó.

Jobim, respondiendo a una pregunta, descartó cualquier movilización de tropas de Brasil a causa de las tensiones en la región, que dijo no aumentarían. "La tensión hace parte, digamos, de la retórica del continente", afirmó.

El ministro dijo sin embargo que las recientes declaraciones de Chávez podrían perjudicar el trámite en el Congreso brasileño del pedido de adhesión de Venezuela al bloque comercial Mercosur, que Brasil integra con Argentina, Paraguay y Uruguay.

"Podrá haber una reacción por parte de sectores del Senado (...). Venezuela debe participar del Mercosur porque es siempre bueno estar presente y estar junto de que estar distante", afirmó.

El ingreso de Venezuela al grupo ya fue aprobado por la Cámara de Diputados de Brasil y está pendiente de su votación en el plenario del Senado.

Sin embargo, el ingreso del país como miembro pleno del bloque pende todavía de su aprobación por el Congreso de Paraguay. Las legislaturas de Argentina y Uruguay ya lo aprobaron.

 

Reuters