Un vendedor de periódicos en Dublín, Irlanda, con un cartel que dice '48 horas para salvar al euro'. La crisis de la deuda soberana de Irlanda y cómo evitar un efecto dominó que pudiera hacer trastabillar a otros países vulnerables, como Portugal, fue el tema dominante de una reunión de ministros de finanzas europeos el martes 16 de noviembre de 2010 en Bruselas.

Internacional

Aún no hay rescate financiero para Irlanda

Una muy esperada reunión de ministros de finanzas europeos terminó el martes sin un acuerdo para rescatar al endeudado gobierno irlandés.

17 de noviembre de 2010

Sin embargo, las autoridades de la Unión Europea dijeron que han intensificado sus preparativos para un posible apoyo al atribulado sector bancario del país. Representantes de la UE, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional viajarán a Irlanda esta semana para determinar qué hacer con relación a los bancos, dijo el ministro de Finanzas irlandés, Brian Lenihan.

"Irlanda está enfrascada ahora en un compromiso intenso y abierto en relación a los problemas del sector bancario", dijo Lenihan. "Tomaremos cualquier medida decisiva que se requiera para estabilizar nuestro sistema bancario como parte de la estabilidad de la eurozona más amplia".

Ayudar a los bancos le quitará algo de presión al gobierno, pero aún está por verse si las declaraciones del martes ayudarán a tranquilizar al mercado de bonos cuando se retome el intercambio el miércoles.

Los temores de que Irlanda no pueda pagar el costo de rescatar sus bancos, los cuales comenzaron a tener problemas cuando se derrumbó el auge en el mercado inmobiliario del país, han empeorado la crisis deudora del gobierno europeo y aumentado los temores de que esto se contagiará a otros países con dificultades financieras. Los mercados han hecho aumentar el costo de los préstamos para otras naciones vulnerables como Portugal y España, además de que han amenazado con desestabilizar al euro.

La tasa de interés de la deuda irlandesa subió nuevamente el martes, al disminuir las esperanzas de que el país busque un rescate como el que salvó a Grecia de incumplir el pago de sus bonos en mayo. De cualquier forma, un paquete de rescate de 750.000 millones de euros continúa listo para otros países que comparten la moneda, en caso de que lo requieran.

Los gobiernos que enfrentan deuda _acumulada durante la recesión y en algunos casos durante años de gastar por encima de sus posibilidades_ han recortado sus gastos y aumentado los impuestos. Pero estas medidas de austeridad amenazan con diezmar el crecimiento económico tan necesitado, dificultándole a su vez a las naciones el pago de sus deudas.

El gobierno irlandés argumenta que no necesita ayuda, o por lo menos no de momento, pues tiene suficientes fondos de aquí a mediados del 2011 y planea recaudar 6.000 millones de euros en reducciones y aumentos fiscales en ese mismo año.

Sin embargo, ha dado a entender que la ayuda directa de la Unión Europea a los bancos irlandeses podría impulsar el valor crediticio del país, ya que el gobierno ha garantizado las obligaciones financieras de los bancos, y como resultado enfrenta una cuenta por pagar de al menos 45.000 millones de euros.

"Las autoridades irlandesas están comprometidas a trabajar" con la UE, el Banco Central Europeo y el FMI con el fin de "determinar la mejor manera de dar cualquier apoyo necesario para atender esta crisis en el mercado, en especial con respecto al atribulado sector bancario", dijo el jefe de asuntos monetarios del bloque europeo, Olli Rehn.

"Esto puede ser considerado como una intensificación de las preparaciones para un posible programa (de apoyo) en caso de que se requiera y sea considerado necesario", afirmó.

 

AP