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Datos no impulsan mercados, el mundo espera por Obama

20 de enero de 2009

LONDRES  Una mejora en la confianza para invertir en Alemania no logró impulsar un apático mercado de acciones el martes, ya que los inversionistas seguían preocupados por los problemas del sistema financiero pese a la promesa de más intervenciones multimillonarias en todo el mundo.

La confianza de analistas e inversionistas financieros en torno a la mayor economía de Europa mejoró más de lo previsto en enero. El índice de confianza económica del grupo de expertos del instituto ZEW subió a -31,0 desde -45,2 en diciembre. Un sondeo de Reuters entre analistas había apuntado a una lectura de -44,0.

Datos económicos de Gran Bretaña mostraron que la inflación en los precios al consumidor tuvo en diciembre su mayor desaceleración desde abril de 1992, aunque menos de lo esperado por analistas, tras bajas en los precios del petróleo y una reducción del 15 por ciento en el impuesto al valor agregado.

El índice principal de la inflación de los precios al consumidor se moderó al 3,1 por ciento desde 4,1 por ciento, ubicándose así en el menor ritmo desde abril del 2008. Los analistas habían previsto una caída aún mayor en la tasa anual, al 2,7 por ciento.

El lunes, Gran Bretaña lanzó a sus atribulados bancos su segundo paquete de rescate en tres meses por miles de millones de libras y dio luz verde al banco central para que inyecte dinero en la maltrecha economía debido a que las tasas de interés están ahora cercanas a cero.

En un dato que destacó el mal estado de la economía mundial, Japón reportó un desplome récord en la confianza del consumidor el mes pasado, en lo que fue otra señal de la profundidad de la recesión.

Los inversores se mantenían inquietos pese al segundo paquete británico de rescate y los participantes del mercado dijeron que la confianza seguiría débil a pesar de los esfuerzos mundiales por contener los males del sector financiero.

"Esto mayormente es una expresión de esperanza. El indicador (ZEW) sigue estando claramente en territorio negativo. Nada ha cambiado en términos de la recesión 2009", dijo Gerd Hassel, economista de BHF-Bank.

Cifras económicas que se esperan esta semana y noticias de cambios y reducciones corporativas sólo apuntaban a profundizar los problemas.

El minorista alemán Metro planea recortar 15.000 empleos o un cinco por ciento de su fuerza laboral global para el 2012, dijo a Reuters el martes una fuente cercana a la compañía.

Y la firma británica de bienes de lujo Burberry anunció un ahorro de hasta 35 millones de libras (49 millones de dólares), que incluye el recorte de 540 puestos de trabajo en Gran Bretaña y España.

Las acciones mundiales caían un 1,2 por ciento y el índice europeo de acciones FTSEurofirst 300 perdía un 0,9 por ciento.

"Después de la carnicería de ayer, el humo sigue rondando a los mercados", dijo Justin Urquhart Stewart, director en Seven Investment Management. .

En Gran Bretaña se debe confirmar el viernes que la quinta mayor economía del mundo está en su primera recesión desde 1992.

China, el principal motor de crecimiento del mundo, reportó el martes su primer alza en el desempleo urbano en cinco años. El país difundirá el dato sobre el crecimiento del PIB en el cuarto trimestre el jueves, donde se pronostica un crecimiento anual del 7,0 por ciento, el menor ritmo en nueve años.

PROMESA FRANCESA A AUTOMOTRICES

El primer ministro de Francia, Francois Fillon, dijo que los fabricantes de autos necesitaban una masiva y pronta ayuda financiera y que su Gobierno estaba considerando un paquete de rescate por un valor de 5.000-6.000 millones de euros.

"Creo que los Gobiernos de toda Europa comparten esta opinión. Nosotros no esperaremos. Hay una emergencia y se necesita una respuesta masiva sobre el financiamiento al sector automotriz", dijo Fillon.

Sus comentarios, durante una cumbre sobre ayuda a la golpeada industria automotriz de Francia, se conocen después de que el jefe de la firma PSA Peugeot Citroen pronosticara un año "terriblemente difícil" en el 2009.

En otra noticia del sector, Chrysler anunció el martes que junto a la italiana Fiat Group y al fondo Cerberus Capital Management L.P., controlador de la automotriz estadounidense, firmaron un acuerdo no vinculante para establecer una alianza estratégica global.

La automotriz estadounidense dijo que la alianza, que será un elemento clave de su plan de viabilidad, entregaría a Chrysler acceso a plataformas de vehículos eficientes en combustible, cajas de velocidad y componentes que serán producidos en sus propias plantas.

Los problemas de la industria automotriz, que son más graves en Estados Unidos, destacan las enormes dificultadas que tendrá que enfrentar Barack Obama.

Obama, el primer afroamericano que llega a la presidencia de Estados Unidos, jura el martes y de inmediato recibirá como herencia una profunda caída de la economía, un déficit federal presupuestario que asciende a billones de dólares y temores de nuevas quiebras bancarias y de un alza del desempleo.

El equipo de Obama se ha comprometido a revisar y darle mejor uso a los fondos de rescate ya aprobados a fin de hacer fluir el crédito entre los consumidores y las compañías, y se espera que pronto anuncie cambios para la segunda mitad del programa de rescate financiero de 700.000 millones de dólares.

El próximo presidente de Estados Unidos también trabaja con los legisladores para lanzar otro plan de estímulo financiero de 825.000 millones de dólares hacia mediados de febrero.

En uno de los más esperados discursos de toma de posesión, se prevé que Obama busque transmitir confianza a los estadounidenses de que el país puede recuperarse de las dificultades que atraviesa.

Sin embargo, el desafío y las expectativas son inmensas.

"Las expectativas para la administración Obama son indescriptibles", dijo William Keylor, un profesor de historia en la Universidad de Boston. "Cualquier cosa que él logre, estará debajo de las extraordinarias expectativas que tiene la gente en él".

Reuters