Colombia dará a OEA detalles de rescate de rehenes

Washington.- La Organización de los Estados Americanos (OEA) convocó para el martes una sesión especial para oír detalles de la operación que permitió al gobierno de Colombia liberar de manos de la guerrilla a 15 rehenes, así como buscar una resolución de reproche al secuestro y apoyo a la búsqueda de la paz en ese país sudamericano.

La sesión será de los embajadores que conforman el Consejo Permanente de la organización de 34 miembros y tiene como único tema de la orden del día la presentación colombiana sobre el rescate del 2 de julio, una jornada que Colombia está presentando ante la organización como "Triunfo de la libertad y la democracia".

Sandra Ocampo, portavoz de la embajada colombiana en Washington, dijo que "será una presentación completa de cómo sucedieron los hechos" que llevaron a la liberación de la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt, tres estadounidenses contratistas del Pentágono y 11 militares colombianos, que estuvieron en cautiverio entre 5 y 10 años.

Los detalles de la operación han sido ya explicados en Colombia por el ministro de Defensa Juan Manuel Santos y el general Freddy Padilla, jefe de las fuerzas militares. En la OEA serán expuestos por el general Gilberto Rocha, agregado militar colombiano quien también ejerció el cargo de Padilla.

Ocampo indicó que luego de la exposición, la delegación colombiana, que encabezará su embajador ante la OEA Camilo Ospino, buscará una resolución de tres puntos: condena del secuestro, felicitación a Uribe y respaldo a Colombia en su búsqueda de la paz.

La OEA ha tocado el tema de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) hasta en tres oportunidades desde abril, en que fuerzas militares colombianas atacaron un puesto de la guerrilla en territorio ecuatoriano.

El secretario general José Miguel Insulza fue encomendado por los cancilleres americanos para buscar un acercamiento entre Ecuador y Colombia, luego que el gobierno de Quito rompiera relaciones diplomáticas con Bogotá después del ataque.

Reuters