Las tendencias tecnológicas que triunfarán después de la pandemia

Ahora más que nunca es esencial tener la infraestructura necesaria para respaldar un mundo digitalizado y mantenerse actualizado en las últimas tendencias tecnológicas, no sólo en el sector privado, sino en el público y, así, ser competitivos en el mundo después de la Covid-19.

La pandemia ha sido un punto de inflexión para la transformación digital y ha acelerado varias tendencias importantes que ya estaban en marcha antes de la cuarentena. La pandemia tendrá un efecto duradero no solo en la economía, sino también en cómo nos desenvolvemos en nuestra vida diaria.

Si bien esta crisis sanitaria ha obligado a muchas empresas a reducir o suspender sus operaciones, lo que ha afectado sus resultados finales, también ha ayudado a acelerar el desarrollo de varias tecnologías emergentes.

Por ejemplo, se han creado innovaciones que reducen el contacto de persona a persona, automatizan procesos y aumentan la productividad en medio del distanciamiento social. Estas son algunas de las tecnologías que estarán en auge después de la pandemia:

5G y Tecnologías de Información y comunicación 

La importancia de la red 5G se fundamenta en que todas las innovaciones tecnológicas que se mencionarán a continuación se basan en el uso de conexiones a internet estables, asequibles y de alta velocidad.

Esta, hace referencia a la quinta generación de las tecnologías de comunicación inalámbrica, como la que utilizamos en los celulares para conectarnos a internet, pero con mayor velocidad.

En Colombia, el Ministerio de las TIC le permitió a Claro, Telefónica, ETB, Xiro Investment Group e ITICS realizar pruebas de esta tecnología, lo que cobra pertinencia en este momento, pues la red 5G tendrá un papel significativo en la reactivación económica mundial y es importante que el país se encuentre a la vanguardia frente a este tema.

Compras en línea y entregas robotizadas

El comercio electrónico ha sido el gran beneficiado durante la pandemia. El confinamiento ha causado el cierre del comercio físico y las ventas online se han posicionado como la solución a esta problemática.

A pesar de que todo empezó por la crisis sanitaria, gracias a la Covid-19, las personas, como las empresas, se han dado cuenta de los beneficios del e-commerce y su uso se ha acelerado con el paso de los días.

Un reporte de la consultora Kantar afirma que Colombia es el país de la región donde más ha crecido el comercio electrónico durante la pandemia. De hecho, 67% de las personas encuestadas afirmó que seguirá utilizando canales digitales para hacer sus compras y pagos después del confinamiento.

Pero las compras en línea deben estar respaldadas por un sistema logístico solido, siendo el transporte una parte fundamental.

En Estados Unidos y en China ya están utilizando servicios de entrega sin contacto, donde se dejan los productos en un lugar designado y se están realizando pruebas con robots para hacer las entregas a domicilio.

Billeteras electrónicas y métodos de pago digitales

Ahora, los pagos digitales sin contacto, ya sea en forma de tarjetas o billeteras electrónicas, son el método de pago recomendado para evitar la propagación de covid-19. Los pagos digitales permiten a las personas realizar compras y pagos en línea de bienes, servicios e incluso pagos de servicios públicos, así como recibir fondos de estímulo más rápidamente. 

Una e-wallet o billetera electrónica es una tecnología que le permite administrar su dinero de forma virtual desde su celular para, de esta forma, realizar cualquier tipo de pago en el instante. 

¿Cómo funcionan? Esta tecnología funciona a través de una aplicación para smatphones, en la que debe guardar su dinero y después va a poder hacer transacciones en internet, o en comercios que soporten la tecnología.

Las billeteras electrónicas le permiten administrar su dinero de manera virtual.

Por ejemplo, en algunos países, como en Corea, hacen pagos en locales solo con pasar el celular; y pagan su pasaje de bus con ayuda de su smartphone.

Algunas de las ventajas de su uso son la disminución de robos, por la migración del uso de efectivo a dinero electrónico, la disponibilidad inmediata del dinero, disminución de costos de transacción, ahorro de tiempo, seguridad en el tratamiento de los datos, entre otros.

Otra innovación que ya están probando en otros países, como Tailandia o Chia, es la CBDC o Central Bank Digital Currency, que es una moneda electrónica emitida directamente por los bancos centrales de cada país, que reemplazaría el dinero en efectivo y competiría con monedas electrónicas como el bitcoin.

Tecnologías para el trabajo remoto

El coronavirus ha estimulado el crecimiento del trabajo remoto. Además de prevenir la propagación de virus, también ahorra tiempo de transporte y brinda más flexibilidad.

Según un estudio de SPR-Marco denominado ‘Hábitos de Consumo Post covid-19’, el 80% de los teletrabajadores en Colombia hoy, quieren seguir trabajando en esta modalidad después de la pandemia.

Además, se estima que en el futuro muchas empresas van a trabajar bajo esta modalidad. Por tal razón, es importante que se hagan avances que permitan aumentar la productividad y mejorar las herramientas de trabajo desde casa.

El trabajo remoto está habilitado por tecnologías que incluyen redes privadas virtuales (VPN), protocolos de voz sobre Internet (VoIP), reuniones virtuales, tecnología en la nube, herramientas de colaboración en el trabajo e incluso tecnologías de reconocimiento facial que permiten a una persona aparecer ante un fondo virtual para preservar la privacidad del hogar.

Aprendizaje a distancia

El estudio también ha migrado de las aulas a los hogares. Muchas instituciones educativas comenzaron a ofrecer cursos en línea para garantizar que la educación no se viera interrumpida por las medidas de cuarentena.

Las tecnologías involucradas en el aprendizaje a distancia son similares a las del trabajo remoto y también incluyen realidad virtual, realidad aumentada, impresión 3D y profesores robots que utilizan inteligencia artificial.

Sin embargo, la educación a distancia puede crear una brecha de desigualdad más amplia, pues en todo el país no hay una preparación digital suficiente. 

Además, la brecha en ingresos puede hacer que unos puedan acceder a la educación y otros no, por la falta de recursos como computadores y acceso a internet.