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Es evidente que el empresariado no es ajeno al difícil momento de los mercados mundiales y esto los lleva a calificar mayoritariamente la situación como regular o mala.

Producción industrial cae 4,3% en enero

Según la última encuesta realizada por la Andi, las ventas totales disminuyeron 5,9%. Para los exportadores ésta caída es producto de una fuerte desaceleración en la demanda en países como EE.UU.

18 de marzo de 2009

La Asociación Nacional de Industriales asegura que al iniciarse el año 2009, se mantiene la desaceleración que la industria trae desde el segundo semestre del año anterior, al igual que la producción y las ventas registran caídas y los restantes indicadores muestran también una tendencia al deterioro. Sin embargo, los empresarios aseguran que ya están diseñado estrategias orientadas a aprovechar las oportunidades que genera el momento. Es por ello que el mercadeo, la productividad, la optimización de costos, entre otros, se constituyen en la prioridad de su agenda en el 2009.

De acuerdo con los resultados de la Encuesta de Opinión Industrial Conjunta (Eoic), que la Andi realiza con Acicam, Acoplasticos, Andigraf, Anfalit, Camacol, Icpc y la Cámara Colombiana del Libro, en el primer mes del 2009, comparado con el mismo período del 2008, la producción disminuyó 4,3%, las ventas totales 5,9% y, dentro de estas, las ventas hacia el mercado interno cayeron 4%.

Por sectores las caídas en producción o ventas para la mayoría de las actividades manufactureras, fue evidente. Con respecto a la capacidad instalada, en el mes de enero alcanzó 72,8%, más de seis puntos inferior al nivel observado en el mismo mes de 2008 (79,1%) y por debajo del promedio histórico de la Eoic (76,5%).

El ambiente de incertidumbre, se resume en los indicadores de clima de los negocios de la Encuesta de Opinión Industrial Conjunta. En este sentido, el porcentaje de empresarios que califica su situación como buena se redujo de 68% en enero de 2008, a 45,9% en enero de 2009 y las mejores expectativas para el inmediato futuro son reportados por poco más de la cuarta parte de los empresarios (25,3%), frente a 41,2% hace un año.

Los principales obstáculos que perciben los empresarios en el desarrollo normal de su actividad son baja demanda, costo y suministro de materias primas, tipo de cambio, rotación de cartera, bajos márgenes de rentabilidad, contrabando y competencia desleal, alta competencia en el mercado, falta de capital de trabajo y problemas de orden público.

Según la Andi, las principales estrategias adoptadas por los encuestados son optimización de costos, inteligencia de mercado, mejorar la productividad e innovación y desarrollo de nuevos productos, tanto para el mercado nacional como para el internacional. Sin embargo, en el mercado externo aparece, adicionalmente, la posibilidad de re-negociar precios, teniendo en cuenta al aumento en el ritmo de devaluación.

En materia de empleo, como ya lo había manifestado el Consejo Gremial, la política de la mayoría de los empresarios es mantener el empleo y en algunos pocos casos, incluso aumentarlo.

Para detectar si se perciben efectos inmediatos sobre la actividad industrial, la entidad gremial le preguntó a los empresarios sobre la situación de la cartera comparada con lo que acontecía hace seis meses. Los resultados muestran que, en general, todavía no se perciben grandes problemas en este campo debido a que para más de 2/3 de los industriales la cartera se mantiene igual o ha mejorado. Sin embargo, la cartera de algunos sectores ya comienza a preocupar. Es el caso de confecciones, cuero, calzado, papel y cartón, productos metálicos, hierro y acero, maquinaria eléctrica y autopartes.