Nuevo centro de convenciones en la frontera con Venezuela: el proyecto de Norte de Santander para impulsar el turismo de reuniones

En 2022, Colombia entró en el ranking de los 30 destinos con más eventos realizados en el año y ocupó el tercer lugar en América del Sur, según el informe que al cierre del primer semestre de 2023 presentó la Asociación Internacional de Congresos y Convenciones (ICCA). Bogotá y Medellín han sido reconocidas internacionalmente por su oferta en la industria de reuniones, en la que también se destacan ciudades como Barranquilla y Cartagena.

En este mercado quiere entrar a compartir Norte de Santander. Por eso, buena parte de las inversiones del cuatrienio de la administración departamental estará destinada a la construcción del Centro de Eventos y Exposiciones. Serán tres hectáreas valoradas en 25 mil millones de pesos, con una obra que costará unos 95 mil millones de pesos.

“El ejecutor de este proyecto, que busca el despegue de todos los gremios, sectores económicos y empresariales del departamento, es la Universidad Francisco de Paula Santander. Será un escenario para mostrar lo que hay en la región”, señaló William Villamizar Laguado, gobernador de Norte de Santander.

A este proyecto se suma la construcción de un centro de convenciones en la frontera, en Villa del Rosario, frente a la casa del general Santander, en el centro histórico de Cúcuta. “Quedaría en toda la puerta con Venezuela y facilitaría la realización de congresos y eventos, pero ya no organizados desde la región. La idea es que la gente pueda escoger reunirse en la frontera, como lo hace en Cartagena”, precisó Villamizar Laguado,

De acuerdo con el gobernador, este escenario en Villa del Rosario, que será edificado a menos de 10 minutos del puente internacional Simón Bolívar (uno de los pasos fronterizos con el estado Táchira de Venezuela), representa una oportunidad para la economía nortesantandereana, pues atraería un mercado que hoy se encuentra dolarizado.

De avanzar en este propósito, Norte de Santander sumaría otro escenario comercial a los 27 con los que ya cuenta Colombia en la categoría de centros de convenciones.

Ambos proyectos buscan consolidar al departamento como destino turístico de reuniones y apoyar el tejido empresarial de la región. De acuerdo con la Cámara de Comercio de Cúcuta (CCC), sus agremiados ya superan los 50 mil, de los cuales el 95 % son microempresas.

El alcalde de Cúcuta, Jorge Enrique Acevedo, explicó que a Norte de Santander le ha tocado desarrollarse como región en el intercambio comercial con San Cristóbal, San Antonio y Ureña, “entendiendo que no es fácil para un visitante colombiano atravesar la cordillera Oriental para llegar hasta aquí”.

Por eso, con la frontera abierta, proyectos como estos para impulsar la economía generan esperanza. “Ahora que le quitaron las sanciones a Venezuela en temas de petróleo, el presupuesto de Táchira se hace sentir aquí”, señaló.

En Cúcuta es notable el posicionamiento de Farmatodo, una de las principales empresas venezolanas con fuerte presencia en el territorio colombiano. El plan de expansión incluye abrir cada vez más almacenes en la capital de Norte de Santander, un mercado en el que cadenas nacionales como ARA y D1 también han visto un gran potencial. Solo D1 ya tiene más de 30 establecimientos en todo el departamento.

Zona franca

El otro proyecto en el que estima la administración departamental avanzar en este cuatrienio es la edificación de un parque industrial en zona franca de Cúcuta, para atender la necesidad del sector.

“Con la apertura de la frontera no hay espacios para crecer. El plan es asignar la mitad del área a los empresarios de Norte de Santander y la otra mitad a los que lleguen del resto del país o extranjeros”, concluyó Villamizar Laguado.

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