Los países pobres todavía están sintiendo las consecuencias de la recesión global

Países pobres enfrentan extensa recuperación: BM

Los países pobres todavía están sintiendo las consecuencias de la recesión global pese a las señales de recuperación de las economías industrializadas y emergentes, dijo un reporte del Banco Mundial.

16 de septiembre de 2009

Más de 40 países pobres siguen estancados en el declive económico y tienen problemas para financiar necesidades clave como la salud y la educación a pesar de las señales de recuperación en otras naciones industriales y emergentes, dijo el Banco Mundial en un reporte el miércoles.

"La incipiente recuperación económica global y la mejora en las condiciones de los mercados financieros tienen todavía que proveer el ímpetu necesario para impulsar a las economías de países más pobres, desde la profunda crisis económica y sus graves problemas de financiamiento", agregó el Banco Mundial.

La institución publicó un un informe previo a la cumbre de líderes del G-20 en Pittsburgh de la próxima semana.

En los países más pobres sin recursos presupuestarios para responder a la crisis, el gasto esencial, incluyendo salud y educación, podría enfrentar una brecha de financiamiento de US$11.600 millones en el 2009 debido a la reducción de los ingresos y la mayor demanda de protección social.

En general, el Banco Mundial dijo que había 43 países pobres que todavía corrían riesgo y luchaban contra los efectos de la fuerte baja del comercio, los ingresos de capitales, el turismo y las remesas de los trabajadores.

El presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, instó al G-20 a no dejar solos a los países pobres mientras la recuperación cobra impulso en otras partes, y a suministrar el necesario financiamiento para ayudarlos a salir de la recesión.

El Banco Mundial ha estimado que los países de ingresos bajos enfrentarán necesidades de financiamiento externo de unos US$59.000 millones en el 2009.

Zoellick también instó a los países industrializados a definir los planes que anunciaron en julio para incrementar la inversión en agricultura en US$20.000 millones en los países en desarrollo.

"Hemos visto las promesas pero las buenas intenciones deben ser puestas en operación rápidamente", agregó.

 

 

Reuters