‘Bollywood’, como es conocida la industria del cine de la India, logró superar a Estados Unidos en cuanto al número de entradas a cine vendidas - 2.641 millones frente a 1.358 millones – en ese período. | Foto: Flickr

Cine

La industria del cine indio le sigue los pasos al glamuroso Hollywood

La industria cinematográfica de la India crece a pasos agigantados de la mano de una nueva generación de directores que le ha aportado la cuota de ingenio que le faltaba para seducir a esa enorme porción de espectadores que estaban hipnotizados únicamente por Hollywood.

24 de septiembre de 2015

El mundo mira a Bombay, una de las ciudades más importantes de la India, como la nueva meca del cine a nivel mundial. Luces y cámaras hacen parte del ecosistema de esta urbe de más 20 millones de habitantes que encontró en el cine una forma de internacionalizar la cultura e impulsar la economía.

Y es que el valor de la industria fílmica de ese país es de US$2,10 billones, lo que la sitúa como una de las más poderosas en el mundo. La India, de hecho, produjo más películas en el 2012 (1.620) que China (745), Japón (554) y Estados Unidos (476).

‘Bollywood’, como es conocida la industria del cine indio, logró superar a Estados Unidos en cuanto al número de entradas a cine vendidas - 2.641 millones frente a 1.358 millones – en ese período. 

Sin embargo, en términos de recaudación de dinero hubo una enorme diferencia entre ambos países. Mientras Hollywood obtuvo ingresos por US$10,8 billones, la India logró US$1,59 billones.

Este resultado tiene sabor a victoria si se tiene en cuenta que hasta hace unos años el cine que se producía en el gigante asiático no tenía un mayor impacto a nivel de audiencias en el mundo.

Fenómenos como la globalización e incluso la migración despertaron el interés de los países occidentales por descubrir la esencia de otras sociedades que hasta hace un tiempo eran consideradas ‘lejanas’. El cine, por lo tanto, se convirtió en una importante herramienta para conectar a los pueblos pero también para mejorar sus ingresos.

La India identificó desde hace un tiempo esta oportunidad y por eso promovió el desarrollo de esa industria del entretenimiento, que se ha dotado de modernos equipos y se ha puesto a la vanguardia en materia de técnicas de grabación. 

Desde sus primeros años, el cine indio ha afrontado una  verdadera transformación en materia narrativa, al pasar de las películas de crítica social del director Raj Kapoor (1924 -1988) a las cintas de acción protagonizadas por Sharmila Tagore en la década del 70 o las comedias musicalizadas de Shah rukh Khan. 

Una de las razones que explican el dinamismo de esta industria es la gran fascinación que sienten los indios por el cine, así como el inmenso tamaño del mercado interno de ese país. Con 1,2 billones de habitantes y un Producto Interno Bruto (PIB) per cápita de US$1.498, la India se sitúa como una de las economías más robustas de Asia y una de las de mayor proyección en el mundo.

Las millonarias cifras de ‘Bollywood’

A pesar de que la India se ha visto fuertemente golpeada por la piratería de películas y el adverso contexto de la economía global, el cine de ese país sigue moviendo cifras millonarias por cuenta de la boletería, patrocinio y otros segmentos asociados.  

El listado de las películas que mayores ingresos obtuvieron por cuenta de la taquilla lo encabeza ‘Dhoom’ (US$88 millones), seguida por Chennai Express (US$68 millones), ‘3 idiots’ (US$64 millones) y ‘Happy New Year’ (US$61 millones).

De hecho, en la clasificación de los actores mejor pagos del mundo destacan tres ciudadanos indios. El ranking de la Revista Forbes, que es encabezado por Robert Downey Jr. (US$80 millones), Jackie Chan (US$50 millones) y Vin Diesel 47 (US$47 millones) ubica a Amitabh Bachchan, de 72 años, en la séptima posición (US$33,5 millones).

Un puesto más atrás aparece su compatriota Salman Khan, de 49, (US$33,5 millones) quien se hizo famoso en 1988 con la película titulada ‘Una esposa debería ser así’.

 El actor Akshay Kumar, por su parte, se situó noveno con ingresos de US$32,5 millones, un monto superior al de artistas tan populares como Johnny Depp (US$30 millones), Leonardo Dicaprio (US$29 millones), Daniel Craig  (US$27 millones), Will Smith (US$26 millones), Russell Crowe (US$18 millones), George Clooney (US$16.5 millones) o Brad Pitt (USD$16 millones).