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Gobierno boliviano mantiene decreto contra Petrobras

El gobierno brasileño indicó que el decreto del presidente Evo Morales inviabiliza financieramente las operaciones de las refinerías puesto que con las exportaciones de los derivados, que Petrobras está obligada ahora a entregar a la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), compensaba sus bajas utilidades en la comercialización de productos refinados en el mercado interno.

8 de mayo de 2007

La Paz_ El gobierno ratificó el lunes un decreto que afecta severamente a la petrolera brasileña Petrobras, ante la manifiesta molestia de Brasilia y versiones sobre desabastecimiento de combustibles en Bolivia.

 

El ministro de Hidrocarburos, Carlos Villegas, dijo que el decreto, emitido el domingo y concebido para marginar a Petrobras de la exportación de algunos derivados de la refinación del petróleo, obedece a que la empresa estaba logrando grandes beneficios con ella, pero que "no es una expropiación, una confiscación" de sus refinerías.

 

En rueda de prensa, indicó que el gobierno boliviano sólo conoce "por las agencias de noticias" de la advertencia de la estatal brasileña de que podría recurrir a tribunales arbitrales para zanjar la controversia con el ejecutivo boliviano en cuanto a los intentos de éste de "recuperar" las dos refinerías de la brasileña en Bolivia.

 

Se refirió a versiones de prensa procedentes Brasilia de que el presidente de Petrobras, Sergio Gabrielli, habría declarado que el decreto daña los intereses de la empresa, que ésta fijará un precio final para las refinerías y que si el gobierno boliviano no responde en pocos días acudirá a tribunales internacionales y a la justicia de Bolivia.

 

El gobierno brasileño indicó que el decreto del presidente Evo Morales inviabiliza financieramente las operaciones de las refinerías puesto que con las exportaciones de los derivados, que Petrobras está obligada ahora a entregar a la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), compensaba sus bajas utilidades en la comercialización de productos refinados en el mercado interno. Indicó que quiere vender el 100% de las plantas.

 

Pese a la manifiesta molestia de Brasil, Villegas dijo que las relaciones con el gobierno de ese país son buenas y que "se mantendrán en este o en mejor nivel".

 

Pareció coincidir con Gabrielli al señalar que el gobierno boliviano quiere en cuanto a las negociaciones por las refinerías de la empresa Petrobras Bolivia Refinación (PBR) "que el plazo sea corto, perentorio, hasta llegar a un acuerdo".

 

Simultáneamente, YPFB emitió un comunicado en el que garantizó que la provisión de combustibles no se verá interrumpida en el mercado interno ante versiones de propietarios de estaciones de servicios de la oriental ciudad de Santa Cruz, la más extensa y poblada del país, de que en las últimas horas se ha evidenciado la falta de algunos.

 

Las dos refinerías de PBR, de 40.000 barriles diarios de capacidad, producen el 100% de gasolina y el 60% del diesel que se consume en el mercado interno.

 

El ex superintendente de Hidrocarburos Carlos Miranda y el ex ministro del área Mauricio Medinaceli, en su condición actual de analistas, coincidieron en declaraciones a la AP en que el reciente decreto parece destinado a obligar a Petrobras a vender PBR. El gobierno ha señalado que ofreció unos 60 millones de dólares, pero que Petrobras quiere cerca de 200 millones.

 

A partir del decreto de nacionalización de los hidrocarburos de hace un año, YPFB se encarga de la distribución y comercialización, por lo que los reclamos van contra la empresa boliviana. Informes procedentes de Santa Cruz indican que ahora los surtidores están en alerta máxima ante la posibilidad de que se agudice el desabastecimiento.

 

Villegas dijo que ahora el gobierno boliviano espera la propuesta anunciada por Petrobras, al señalar que la semana pasada le hizo llegar la suya a la brasileña.

 

Indicó que el decreto por el cual se obliga a Petrobras a vender el crudo reconstituido a 30 dólares el barril, responde a que desde la empresa estaría obteniendo "ganancias extraordinarias" en el exterior, donde tiene un precio de entre 50 y 60 dólares.

Señaló que por esa operación, Petrobras recibió en 2006 algo más de 70 millones de dólares.

 

 

 

AP