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Cartera de microcrédito ha crecido 22% en seis meses

Así lo reveló el director del sistema de la Banca de las Oportunidades, Carlos Alberto Moya Franco, quien señaló que hasta julio de 2006 el saldo de cartera era de 3 billones 476 mil millones de pesos y en enero de 2007 se subió a 4 billones 257 mil millones de pesos.

9 de abril de 2007

Sincelejo.- En los seis primeros meses del segundo Gobierno del presidente Álvaro Uribe Vélez el saldo de cartera llegó a 4,2 billones de pesos, mostrando un crecimiento del 22,4 por ciento.

Destacó que el crédito a los microempresarios está aumentando al 22,4 por ciento mientras que en todo el resto del sector financiero lo está haciendo al 12 por ciento, es decir que el microcrédito está creciendo dos veces más rápido que los otros tipos de créditos. Señaló que cada vez hay mas recursos de los bancos en poder del público, generando equidad social, crecimiento económico, sacando de la pobreza a la población que inicia un negocio propio.

Del total del saldo de cartera de 4,2 billones a enero de 2007, la banca comercial tiene 3 billones 270 mil 603 millones de pesos cuando en julio de 2006 contaba con 2 billones 753 mil 546 millones de pesos, es decir que creció en 18,8 por ciento. Por su parte la cartera de las fundaciones pasó de 723 mil millones en julio de 2006 a 986 mil millones en enero de 2007, con un aumento del 36,3 por ciento. La cartera de los organismos cooperativos a diciembre de 2006 llegó a 244 mil millones de pesos. La primera revolución del microcrédito se dio entre los años 2002 y 2006, cuando la cartera de microcrédito era de 732 mil millones de pesos y se subió a 3,2 billones de pesos.

La meta entre los años 2007 y 2010 es llegar a las 5 millones de operaciones de crédito a los sectores más vulnerable socialmente y a quienes estando mejor socialmente necesitan de un préstamo para seguir en algún negocio propio.

Entre junio de 2006 y enero de 2007 han sido aprobados y desembolsados 700 mil operaciones de crédito por cerca de 2 billones de pesos, y la meta es que a agosto del presente año se tengan un millón 250 mil operaciones de crédito.

Con respecto a los microcréditos entregados en el departamento del Sucre, Moya Franco reveló que han sido desembolsados 840 créditos por un valor de 3.430 millones de pesos. En la ciudad de Sincelejo han sido aprobados y entregados 490 microcréditos por un valor de 2.280 millones de pesos.

Con respecto a la filosofía que inspiró al Gobierno Nacional para crear la Banca de las Oportunidades, el presidente Álvaro Uribe recordó que no se trata de un nuevo banco, sino que es un sistema que integra a todas las entidades unidas para prestarle a los más pobres. Indicó que nada se ganaría con que fuera un nuevo banco, pues por más grande que fuera el cubrimiento sería muy poco.

La Banca de las Oportunidades es para los sectores más pobres, madres cabeza de familia, Familias en Acción, a los vendedor de las plazas de mercado, a los vendedores callejeros y a los que sin ser tan pobres, no han podido acceder al crédito y les tocó recurrir al gota a gota.

Sobre la capacitación que se debe dar a los microempresarios que quieran acceder a la Banca de las Oportunidades, el Jefe de Estado señaló que se necesita el Sena siga trabajando. La labor del Sena no es solo capacitar a las personas, sino que hay que acompañarlas, pues al microempresario le es menos difícil si va acompañado al banco a gestionar el crédito, y lo acompaña mientras toda la vida del crédito.

Relató el cumplimiento de las metas del Sena en los cuatro primeros años de su Gobierno: pasó de 1 a 4 millones de estudiantes; antes dictaba 5 millones de horas de enseñanza, el año pasado subió a 15 millones de horas de enseñanza; antes capacitaba a 30 mil técnicos y ahora 130 mil y se subirá a 250 mil. Ahora el objetivo es que capacite a los microempresarios colombianos para que accedan al crédito, y lo puede hacer en emprendimiento para quienes formular el plan de negocios, y en áreas administrativas y financieras. El Sena tiene 116 centros de formación a los que pueden acceder los microempresarios.

 

 

AP