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COMERCIO ELECTRÓNICO

Llegó la hora de hacer e-commerce

El encierro por el coronavirus tomó a muchos por sorpresa. Pero este es el momento de montarse en las plataformas digitales. Los expertos señalan que básicamente no hay otra alternativa para los negocios que buscan triunfar.

14 de mayo de 2020

El estudio Euromonitor 2019 proyectó que el comercio electrónico en 2020 en Colombia iba a ser de US$8.000 millones y que para 2021 aumentaría a US$10.000 millones. Sin embargo, el mismo trabajo dice que apenas 20% de las transacciones de compra se realizan a través de centros comerciales virtuales como Mercado Libre, frente a una cifra de 52% en la región.

Esto confirma que Colombia no estaba muy preparada para hacer comercio por internet en medio de la cuarentena decretada por el Gobierno, que ya lleva más de 45 días. Pero también muestra que se abre una gran oportunidad para las empresas de crecer y subirse a estas plataformas para sobrevivir. Básicamente porque hoy y a futuro no hay otra alternativa.

Un estudio de Google así lo demuestra. A raíz de la pandemia las transacciones relacionadas con e-commerce se incrementaron en más de 50%, aunque no en todas las categorías. “Algunas, como hacer mercado por internet, se cuadriplicaron”, dice Bernardo Vanegas, cofundador de la Cámara Colombiana de Comercio Electrónico. Pero lo más importante es que aumentaron las transacciones entre personas de franjas etáreas que no estaban todavía en el comercio electrónico.

“Individuos entre 55 y 70 años, que ni siquiera pagaban los servicios online porque era plan ir al banco, hoy están confinados por más tiempo que el resto de la población”, agrega.

Esta coyuntura les ha obligado a usar internet para realizar sus vueltas bancarias.

Para Fernando Silvestre, Country Manager de Neoris, adoptar una estrategia de comercio electrónico es una decisión fundamental y no hay una sola solución para todos porque depende del tipo de negocio y servicio que se quiere ofrecer.

No es lo mismo vender un producto que dar cursos online o hacer telemedicina.

Según explica, para dar este salto hay que hacer las preguntas correctas entre las cuales está cómo mantener a los equipos estimulados para no perder el talento.

También es necesario mantener una cadena de abastecimiento, pues “muchas industrias tienen canales para cobrar y el talento, pero fallan en la logística, ya sea porque no reciben materia prima o no tienen capacidad de entregar el producto”, añade.

Además hay que preguntarse cómo seguir manteniendo los flujos de contactos con los clientes. Un caso que sirve de ejemplo es el de los gimnasios, o el de la industria del entretenimiento, que deben reinventarse usando plataformas virtuales, porque no hay forma en el mediano plazo de que sus sedes abran.

Para ambos expertos no solo las grandes empresas tienen que estar pensando en digital, sino también las Pymes e incluso las tiendas de barrio.

Según Vanegas, el primer error que cometen los pequeños empresarios y comerciantes es pensar que la respuesta a las ventas en internet se resuelve solo con tecnología. “Lo que siempre decimos al comerciante es que va a tener un nuevo canal de venta”. Esto implica que debe pensar en las cuatro “P” del mercadeo: producto, precio, promoción y punto de venta. Debe ser una estrategia porque tendrá que poner a conversar ese canal de ventas con sus otros canales. Por eso, el comercio electrónico, según él, reposa en el siguiente trípode.

El catálogo de productos: es la primera pata. Debe tener fotos bonitas, el precio, ficha técnica, registros Invima y descripción del producto. En este punto hay que pensar en una plataforma para venderlo. Hay varias alternativas en el mercado, pero lo importante es que ponga en esa página los productos en existencia, “pues si pone los agotados castiga a la tienda". Vanegas recomienda una solución conocida como Storeon, desarrollada por Tekton que facilita las cosas para los pequeños empresarios, pues ya tiene contrato con todos los centros comerciales virtuales (incluido Amazon) y da servicios adicionales como inteligencia sobre el negocio. Esto representa una ventaja a la hora de lograr que los clientes lleguen a su tienda virtual.

Medio de pago: Hace diez años había dos o tres opciones, pero hoy se puede escoger entre 67 medios de pago, lo que brinda muchas oportunidades para los empresarios. La elección depende de cuántas transacciones va a generar, si va a querer consignar directo en su cuenta o cuánto serán las ventas promedio.

El operador logístico: es la entrega, el punto en el que el negocio se la juega toda porque es el momento de la verdad. “Es cuando se materializa la promesa de valor”, dice Vanegas, y agrega que la gente es tolerante en cuanto a los tiempos, pero castiga a la empresa cuando le dicen que el producto estará en casa en una fecha y llega varios días después. "Ellos agradecen que se les diga en qué estado está su pedido, la hora exacta, pues así los ven como una compañía seria". Agrega que los proveedores logísticos en el país tienen esos servicios.

Los expertos Silvestre y Vanegas creen que los nuevos hábitos de consumo permanecerán después de la pandemia, y que el actual modelo de aislamiento social en adelante podría ser parte de la vida cotidiana. Por eso el mensaje es dar el salto ahora.

Este es el momento de aplicar el viejo adagio de los abuelos: "en épocas de crisis unos lloran mientras otros hacen pañuelos". 

Nuevos tiempos

La telemedicina abarca atención, orientación o consulta en forma remota. Ha tenido un desarrollo lento porque a la gente le da tranquilidad verse con su especialista cara a cara. Pero hoy, debido al coronavirus, las restricciones son mayores y eso ha llevado a una gran adopción de telemedicina en el país. Según Fernando Silvestre, de Neoris, ellos identifican cuáles pueden ser los aceleradores digitales para cambiar el hábito de hacerlo presencial. Un proyecto de estos antes duraría entre seis meses y un año, pero ahora se hace en 15 días.