TRABAJO

El trabajo remoto como alternativa para afrontar la coyuntura actual

La situación que está viviendo el planeta a raíz del COVID-19 está cambiando múltiples parámetros sociales, políticos, económicos y empresariales.

31 de marzo de 2020

Desde hace aproximadamente dos meses, cuando la enfermedad empezó a expandirse en China, uno de los países más afectados, desde los medios de comunicación en Colombia y Latinoamérica se comenzaron a realizar debates sobre la siguiente pregunta: ¿qué pasaría si esa misma situación sucediera en los países de este continente?

En este contexto, y ante la inminente llegada del virus al país, múltiples compañías de diferentes sectores industriales han empezado una carrera contra reloj con el propósito de, no solo tomar la mejor decisión para sus empleados, sino también para continuar con sus actividades diarias y sus objetivos de negocio, más allá de la incertidumbre económica en la que está sumida el planeta.

Por eso, hoy más que nunca, el trabajo remoto ha tomado preponderancia, entendiendo que el contacto social y llevar la vida común y corriente como venía pasando, puede llegar a traer consecuencias que los seres humanos lamentarían. 

De acuerdo con un análisis hecho por la organización International Data Corporation (IDC), firma líder que provee servicios de consultoría y análisis de mercados, cerca del 73% de los empleados en el mundo trabajarán de manera remota durante este año, y existirán más de 20.000 millones de dispositivos inteligentes que cobrarán mayor presencia en los hogares y negocios, trayendo, de esta manera, un enorme desafío y una mayor necesidad de habilitar las comunicaciones y la colaboración a través de la tecnología. 

Las tendencias globales apuntan a la necesidad de transformar los entornos laborales, y estas transformaciones hacen especial hincapié en el trabajo remoto, una modalidad caracterizada principalmente por la realización del trabajo fuera de las oficinas mediante el uso de las TIC, que agrupe políticas internas de trabajo por objetivos.

Acá jugará un papel muy importante la tecnología, herramienta fundamental que le permitirá a los seres humanos cumplir con sus obligaciones laborales y que también va a ayudar a las empresas a asumir este enorme reto, pues la competitividad y el rendimiento de la organización debe continuar por el mismo camino o incluso aumentar. 

El éxito de este modelo depende de su correcta implementación y de la apertura de cada entidad para su adopción, por lo que planificar su incorporación, contar con la tecnología correcta y entrenar al staff para trabajar bajo modalidades flexibles se vuelve cada vez más importante.

¿Pero qué sucede con el 55% de empresas que todavía no contempla esta modalidad? Corren el riesgo de vivir interrupciones imprevistas sin estar preparadas para afrontarlas poniendo en riesgo la continuidad del negocio, deberán tomar decisiones bajo presión que pueden no ser las más adecuadas y asumen el riesgo de incorporar tecnologías a último minuto que, contrario a lo que esperan, no van a ayudarlos a resolver el problema.