Seis muertos dejan accidentes mineros en menos de un mes

El accidente más reciente ocurrió en la noche del lunes en la mina legal de carbón Cerromatoso, localizada en la vereda Rabanal, municipio de Guachetá (Cundinamarca). Al parecer, se violaron las normas de seguridad industrial.

Los socorredores y profesionales del Servicio Geológico Colombiano (antes Ingeominas) lograron recuperar los cuerpos sin vida de dos trabajadores de 27 y 46 años.

El mismo día, en el municipio de Maripí (Boyacá), un accidente mecánico en la mina de esmeraldas a Pita causó la muerte de un empleado, debido a excesos de velocidad del vehículo en el que se transportaba.

El sábado 26 de noviembre se presentó un derrumbe en una mina de carbón de la vereda El Alisal, municipio de Lenguazaque (Cundinamarca). Cuatro trabajadores que se encontraban al interior del yacimiento fueron rescatados.

Dos muertos más dejó una emergencia, también en el municipio de Lenguazaque, ocasionada por un derrumbe que a su vez obedeció a malos manejos en la seguridad industrial de la mina de carbón.

El 16 de noviembre se presentó un accidente en la mina de carbón Quebrada Seca, localizada en la vereda Atraviesas, municipio de Topagá (Boyacá). De acuerdo con el Servicio Geológico Colombiano, el accidente se produjo por la caída de rocas, que produjo la muerte de un trabajador.

Simultáneamente, se registraba en el sector Cerro Tasajero, municipio de Cúcuta (Norte de Santander), un incidente minero ocasionado por un deslizamiento de roca, que produjo un taponamiento de la entrada de la mina de carbón Santa Eduviges.

Los siete mineros atrapados por el derrumbe fueron evacuados ilesos a la superficie por los trabajadores de la zona, quienes removieron el material que estaba obstruyendo la entrada de la mina.

El factor común entre todos los accidentes es que las minas son legalmente constituidas, de socavón, y en la mayoría de los casos están ubicadas en el interior del país e incumplen las normas de seguridad industrial.