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Régimen subsidiado y recobros, la fuente de desangre del sistema de salud

Un estudio señala que mientras el régimen contributivo y el sector de Prevención y Promoción presentan superávit, el régimen subsidiado y el segmento de recobros del Sistema General de Salud y Seguridad Social son la fuente del creciente déficit del sistema.

8 de septiembre de 2017

El Centro de Estudios Económicos de Protección Social y Economía de la Salud (Proesa) destacó en su más reciente informe que el régimen contributivo de salud tendrá un superávit de $881.000 millones este año, al registrar ingresos estimados por $23,4 billones y egresos por $22,5 billones. Por su parte la división de Promoción y Prevención tendrá un superávit de $143.000 millones al prever ingresos por $616.000 millones y egresos por $473.000 millones.

Por el contrario, el régimen subsidiado tendría este año un déficit de $2,6 billones como consecuencia de unos ingresos asegurados por $14,7 billones y que son inferiores a los $17,4 billones que se registrarían como egresos. Además el sistema de recobros estima pagos por $2,4 millones.

Así, el déficit del Sistema General de Salud y Seguridad Social (SGSSS) para este año sería de $1,6 billones.

Proesa destacó además que de acuerdo con los últimos datos publicados, el gasto total en salud en el país representa el 7,2% del PIB, dividido en 75,1% público equivalentes a $46,7 billones y 24,9% privado.

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Además, si se mide el gasto real del sistema de salud de acuerdo con los usos del SGSSS aumentó en 7,2% durante el 2014, en 2% el 2015 y en 3,6% durante el 2016, un crecimiento importante pese a que se redujo en los dos últimos años.

En ese sentido, Proesa destacó también que los pagos de ambos regímenes a las EPS crecieron 6,3% en 2014, 5,1% en 2015 y 5,6% en 2016.

Fuente: Proesa

La balanza comercial del sector también es deficitaria. Por un lado, las exportaciones se mantuvieron constantes alrededor de los US$500 millones entre el 2009 y el 2016. Por el otro lado, las importaciones casi se duplicaron al pasar de US$1.280 millones en 2009 a US$2.106 en 2016.

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Por su parte el PIB del sector salud creció 2,3% en el segundo trimestre de este año, al compararlo con los mismos meses del año anterior y superior al 1,3% de la economía nacional.

Dicho comportamiento es evidente en otros factores. Por ejemplo, en el segundo trimestre del 2017, el volumen de personal ocupado del sector salud humana privada creció 1,6% frente a igual trimestre del año anterior, explicada principalmente en el empleo permanente (2,1%) y del empleo temporal (0,01%).

“Desde el 2015, no se evidenciaba en el sector salud una variación del empleo permanente superior al crecimiento del empleo temporal”, señaló Proesa.

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