Covid-19 llevará a nuevos liderazgos

Un reciente informe del Wall Street Journal relevó cómo cada vez más corporaciones están desarrollando planes de trabajo en caso de que sus CEO o líderes de área caigan enfermos por el coronavirus o deban ausentarse del trabajo para atender a un familiar.

Es un tema que muchas empresas no se plantean, pero que se hace necesario para que los negocios puedan seguir andando. “Los equipos administrativos están fortaleciendo sus planes de sucesión y revisando los procedimientos operativos de respaldo por si altos ejecutivos u otros empleados críticos se enferman. Algunas empresas están incluyendo a más personas en los proyectos para duplicar la toma de decisiones, o insisten en que el personal técnico documente su trabajo con mayor detalle para que otros puedan ayudar, si es necesario”, sostiene el artículo que fue escrito por Chip Cutter.

Otro de los grandes cambios que vendrá a nivel empresarial estará en la necesidad de que aparezcan nuevos líderes en el sector privado, que cada vez deberán coordinarse más con el Gobierno y los sectores sociales para ejercer su responsabilidad con la sociedad.

Jorge Hernán Cárdenas, director de la consultora Oportunidad Estratégica, considera que en las actuales circunstancias las empresas que tengan la capacidad de ayudar deberán aportar para mejorar la capacidad hospitalaria y la atención a trabajadores de la salud, así como al procesamiento masivo de pruebas coronavirus.

Los expertos de The Economist también advierten que cuando terminen las cuarentenas las empresas no trabajarán al 100% de su capacidad (ni siquiera las de China ya lo están haciendo), pues como cualquier convaleciente primero caminan y luego corren. “El ingenio, no solo el músculo financiero, se convertirá en una fuente de ventaja y les permitirá a las empresas más inteligentes operar más cerca de su velocidad máxima. Eso significará reconfigurar las líneas de producción para el distanciamiento físico, el monitoreo remoto y limpiezas profundas”, dice la revista británica y vaticina que es factible que en futuros foros o conferencias se repartan tapabocas a la entrada o que los restaurantes publiciten sus altos regímenes de higiene.

Otra probable consecuencia será la concentración de algunas industrias, pues los jugadores más fuertes comprarán rivales para expandir su participación de mercado o asegurar su suministro y distribución.

Gobiernos empoderados

Durante décadas muchos propusieron minimizar el papel del Estado y reducir su tamaño y participación en diferentes sectores. Pero el coronavirus podría fortalecer los gobiernos y la actividad pública.

Además de protagonizar la atención de la emergencia, los gobiernos se van a volver más empresariales, dado que tendrán que invertir más en innovación, desde inteligencia artificial hasta salud pública y energías renovables, y en salvar algunas empresas.

Sin embargo, esta crisis también hará que los Estados aprendan a negociar para que todos los ciudadanos sientan los beneficios de la inversión privada, no solo unos pocos.

Expertos del Foro Económico Mundial también recomiendan repensar las alianzas público-privadas, que con frecuencia parecen decisiones en las que gana la parte privada sobre la pública. Igualmente, los gobiernos deben seguir fortaleciendo sus instituciones y su generación de confianza entre los ciudadanos, pues de esto dependerá que cumplan las nuevas reglas sociales cuando terminen las cuarentenas, y poder actuar de forma más coordinada ante futuras crisis.