Minhacienda: al Presupuesto de 2019 le faltan $25 billones

Durante un nuevo debate de las Comisiones Terceras y Cuartas del Senado y la Cámara de Representantes sobre el Presupuesto General de la Nación 2019, el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, reveló cuáles son los programas que están desfinanciados para el próximo año y explicó cómo se les dará prioridad a algunos.

Los cálculos del Ministerio de Hacienda es que para pagar por completo el Presupuesto General de 2019 faltan $25 billones de los $259 billones que el anterior gobierno propuso “gastar” durante dicho año.

De acuerdo con el cálculo, el faltante más grande está en los recobros del Sistema de Salud, al que le faltan $3 billones; en segundo lugar están los pagos de las sentencias ejecutoriadas con $2,8 billones; le siguen “Más Familias en Acción” con $1,9 billones.

Para aumentar la cobertura de atención a la primera infancia, programa del ICBF, faltan $1,6 billones, mientras que para la atención de población vulnerable, proyectos productivos e infraestructura todavía no se sabe de dónde saldrán $1,5 billones.

Y tal como lo había advertido un día antes el mismo ministro, para los subsidios de electricidad todavía faltan $1,2 billones.

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El ministro Carrasquilla señaló que “el 95% o más del Presupuesto que estamos discutiendo está sujeto a unas rigideces que empiezan, por ejemplo, por el pago de los intereses de la deuda (...) eso vale 3 puntos del PIB, cerca de $30 billones”.

Y destacó que el Sistema General de Participaciones, que tampoco se puede modificar, cuesta otros $34 billones y las mesadas pensionales, sumando todos los regímenes especiales que quedan y los subsidios del sistema actual, representan $40 billones. Solo esos tres rubros suman cerca del 80% del Presupuesto.

Por esta razón, el ministro le pidió a los congresistas que le tengan “un poco de tolerancia cuando les digo que el presupuesto que presentó el anterior gobierno va a ser muy parecido al que va a salir de estas discusiones y eso se debe a las rigideces presupuestales que se han introducido”.

Para solucionar la inflexibilidad del Presupuesto y procurar cumplir con todas las obligaciones del Estado, Carrasquilla explicó que los recursos destinados para inversión del próximo año priorizarán en su orden el pago de las vigencias futuras; la atención a las víctimas del conflicto; el cumplimiento de los programas sociales, así como de las leyes y fondos especiales; los demás programas y sectores de acuerdo con la restante disponibilidad de dinero y por último, los recursos propios.

De acuerdo con el proyecto actual de Presupuesto para 2019, los $259 billones provendrán de $243 billones de recursos de la Nación y los restantes $16 billones de recursos propios de las diferentes entidades del Gobierno.

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Por un lado, los ingresos corrientes sumarían $144,8 billones entre tributos internos por $122,3 billones y externos por $21,2 billones, mientras que los recursos no tributarios sumarían $1,3 billones.

En este rubro, el Ministerio de Hacienda espera que si bien se mantenga su proporción con referencia al PIB, se puedan recaudar $500.000 millones provenientes de los primeros cobros por valorización predial de las obras de Cuarta Generación.

Los ingresos de capital llegarían a $85 billones, un incremento de 0,6 puntos porcentuales y serían consecuencia de mayores dividendos del sector petrolero y la continuación del plan de enajenaciones de empresas en las que la Nación tiene participación.

Los fondos especiales le darían al Gobierno otros $11,1 billones y por último, la renta parafiscal significaría $2,1 billones.

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