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Los retos del nuevo Minsalud

El nombramiento de Fernando Ruíz Gómez fue bien recibido dentro del sector. Su principal reto será implementar adecuadamente todas las reformas estructurales que se aprobaron para el sector en el Plan Nacional de Desarrollo.

9 de febrero de 2020

A través de un mensaje en su cuenta de Twitter, el presidente Iván Duque dio a conocer al nuevo ministro de salud, Fernando Ruiz Gómez quien llega a la cartera tras la salida de Juan Pablo Uribe a finales de diciembre del año pasado.

El nombramiento de Ruiz fue muy bien recibido por los gremios del sector salud que ven en su reconocida trayectoria académica y en el sector una garantía de que en el Ministerio se seguirá manejando con el carácter técnico que han tenido los últimos ministros del ramo. 

Fernando Ruiz es médico cirujano, máster en Salud Pública de Harvard, máster en economía de la Javeriana y Doctor en Salud Pública del Instituto Nacional de Salud Pública de México. Ruiz había ocupado el viceministerio de Salud durante el gobierno Santos. En la actualidad, estaba dirigiendo el Centro de Tratamiento e Investigación sobre el Cáncer de la Organización Sarmiento Angulo. 

“Estamos muy contentos y complacidos con que se haya mantenido el perfil técnico del Ministerio de Salud en cabeza de un hombre de una trayectoria impecable como el doctor Ruiz”, afirmó Gustavo Morales, Presidente Ejecutivo de ACEMI.

Lo mismo considera Juan Carlos Giraldo, Director de la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas (ACHC) para quien la gran ventaja de Ruiz es que tiene un alto conocimiento del sector salud y de sus agentes pues ha trabajado en diversos cargos de dirección. Tanto en el sector público como privado, es decir “no llega a aprender”. 

Para los conocedores del sector, el gran reto del nuevo Ministro será implementar adecuadamente todas las reformas estructurales que se aprobaron para el sector salud en el Plan Nacional de Desarrollo. 

Cabe recordar que el sector salud fue uno de los sectores más reformados en el Plan de Desarrollo de la administración Duque y que muchas de estos cambios se encuentran pendientes de reglamentación.

En el Plan se hizo desde el acuerdo de Punto Final que busca sanear las históricas deudas entre los diferentes actores del sector para lograr su sostenibilidad ?nanciera hasta ponerles “techo” a los recobros que se hacen al sistema. También está pendiente avanzar en el pago de por resultados en calidad para mejorar la prestación de servicios por parte de las EPS, así como el tema de los subsidios parciales. 

Para Giraldo el reto del Ministro a corto plazo es hacer que el acuerdo de punto final se convierta en una realidad. Es decir, acelerar el programa para que se cumplan los cronogramas de desembolsos y asegurarse que los agentes reciban la liquidez que se requiere. 

Además, el representante de los hospitales y clínicas del país le pide al nuevo ministro que trabaje en una ley de punto final 2.0 dado que hay muchos renglones de deuda que no están siendo objeto del acuerdo como las liquidaciones. “Sería una especie de ley de quiebras del sector salud que garantice que cuando una entidad se liquida hay un fondo de garantías o fuentes ciertas para que no genere daño a otras entidades del sector”, explica. 

Otro tema para este año es la reglamentación de los limites presupuestales para los bienes y servicios que no están en el Plan Obligatorio de Salud (POS). La implementación de “techos”.

En el mediano plazo hay que avanzar en temas como garantizar que la factura electrónica sea una realidad en el sistema de salud, así como en el giro directo para automatizar aún más el flujo de recursos dentro del sector. 

Otra de las tareas pendientes del Ministerio, según otros expertos, es el fortalecimiento de la Superintendencia Nacional de Salud para dotarla de más herramientas para mejorar la vigilancia y el control sobre el sector. Cabe recordar que la mitad de las EPS del país hoy tienen planes especiales de mejoramiento o medidas especiales de vigilancia. 

El nuevo ministro también tendrá que continuar con la política de control de medicamentos mejorando el monitoreo del mercado para determinar no solo el cumplimiento de las normas sino para determinar qué medicamentos deben ser regulados. 

No hay que perder todo el esfuerzo que se ha hecho pues sería triste que después de todo ese trabajo (borradores de decreto, resolución). Es necesario darles toda la certidumbre jurídica a los jugadores del sector, afirma Acemi.  

Sin embargo, otros gremios como la ACCH consideran que es necesario que se tome una decisión de sobre la reforma estructural del sistema para buscar una mejor atención primaria y el establecimiento de redes, un cambio en el papel de las EPS y repotenciar el Adres para que se convierta en el asegurador central.  

El otro reto mayúsculo del Ministerio es la atención de la población migrante no solo en términos de aseguramiento sino el fortalecimiento de los hospitales públicos en áreas como Cúcuta, La Guajira, Cartagena, Bogotá, Arauca y otras ciudades especialmente afectadas por el fenómeno migratorio. 

Algunos expertos que el Ministerio debería ponerle mayor atención a los problemas de seguridad vial y tratarlo como un tema de salud pública pues ponen 7.000 muertos al año, especialmente por accidentes por motos. 

Sin duda, el nombramiento de Ruiz fue tomado como una buena noticia para el sector. Sin embargo, el llamado es a construir sobre lo construido 

Por último, el fin principal del sector debería ser trabajar en la prevención y la promoción de estilos de vida saludables para luchar contra temas como la obesidad, el sedentarismo y hasta el consumo de sustancias psicoactivas dentro de la población, especialmente los jóvenes. 

En la hoja de vida del Ministro también destacan su participación como miembro de Comité Ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), como consultor de Salud para el Banco Mundial y como miembro del Comité de la Organización para el desarrollo Económico. 

El nombramiento no ha estado exento de críticas por parte de algunos grupos políticos por la cercanía de Ruiz con el partido Cambio Radical y Germán Vargas Lleras, de quien se le considera cuota política.