Fenalco: el comercio es inviable con la “nueva normalidad” de Bogotá

El nuevo modelo bajo el que funcionará Bogotá contempla horarios diferenciales para la mayoría de sectores económicos. La construcción, por ejemplo, trabajará de lunes a sábado después de las 10:00 a. m.

En los mismos días lo pueden hacer las oficinas e instituciones educativas, a excepción de los jueves y manteniendo al 70% de sus empleados o estudiantes con trabajo en casa.

Según la alcaldesa Claudia López, el comercio es el que más costo epidemiológico tiene, por lo que las actividades productivas sin contacto, tales como el comercio al por mayor y la manufactura, podrán funcionar entre lunes y jueves. En las noches, a partir de las 7:00 p. m., podrán darse pilotos comerciales de Bogotá Despierta. 

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Además, de jueves a domingo trabajarán aquellas actividades que tengan contacto con el público como restaurantes, lavanderías, peluquerías, papelerías, entre otras, sin una restricción de horario específica.

Ante esto, el director de la Federación de Comerciantes, en su capítulo de Bogotá-Cundinamarca, señaló que este modelo llevará a la quiebra a más comercios en la capital y no es rentable.

“Con lo que propone la Administración vamos a abrir de jueves a domingo, es decir, el 55% del tiempo que normalmente abríamos; a eso le sumamos que cada día solo vamos a atender a la mitad de la población que normalmente atendíamos, esto por la medida de pico y cédula, es decir, el comercio trabajaría al 27,5% de su capacidad”, dijo Juan Esteban Orrego.

Y añadió que el modelo que reduce su operación no da para pagar las cuentas completas de los comercios, que incluyen obligaciones como arriendos, nómina, servicios públicos, impuestos, recargos dominicales y demás gastos, por lo que “el comercio sería inviable en Bogotá”.

Los comerciantes también señalaron que el modelo de atención al público en determinados días propicia aglomeraciones, medida que va en contra de mantener el distanciamiento social para evitar contagios del coronavirus.

Fenalco Bogotá pidió al Concejo de la ciudad que realice el control político antes de la expedición de este Decreto, ya que es una “norma discriminatoria, propicia aglomeraciones y quiebra a los comercios”. La propuesta del gremio es que el comercio formal abra los siete días de la semana de 10:00 a. m. a 10:00 p. m.

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El decreto que expedirá la Alcaldía Mayor de Bogotá aún se encuentra en fase de comentarios, por lo que los comerciantes harán llegar un documento con sus principales reparos, entre los que están los siguientes puntos:

• El comercio informal no tiene restricciones, por lo que, sin duda, el comercio formal (mayor tributante y generador de empleo) está en plena desventaja y esto incrementará de manera exponencial la informalidad.
• La alcaldesa ha manifestado en diferentes medios de comunicación que el comercio al por menor podría operar de jueves a domingo, sin restricción de horario. Sin embargo, en el punto d) del artículo 3 del borrador de decreto, asegura que las actividades de jueves a domingo podrán operar hasta las 9:00 p. m.
• No es claro si en días feriados el comercio al por menor puede abrir.

Además, hay una serie de observaciones puntuales de las actividades económicas que representa el Gremio.

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“Los comerciantes formales trabajamos por y para la ciudad, hemos invertido grandes recursos para cumplir los protocolos de bioseguridad, y no es correcto que nos estigmaticen, porque somos los más interesados en trabajar en equipo y poder aportar al Estado”, manifestó Orrego.