Las razones por las que el proyecto Sagrada Familia de Cali fue negado

La Alcaldía de Cali aseguró que el proyecto de construcción de La Sagrada Familia donde antes se ubicaba un colegio tradicional de esa ciudad, debía obtener una autorización de la administración municipal por tratarse de un Bien de Interés Cultural.

Aunque tanto la curaduría como la Alcaldía de Cali le concedieron a la constructora Jero SAS la licencia de construcción para realizar pequeñas modificaciones a la edificación y convertirla en un hotel con algunos locales comerciales anexos, luego la constructora solicitó la modificación de dicha licencia para ampliar su obra.

Sin embargo, la administración municipal advirtió que la construcción de un centro comercial con cuatro salas de cine y un supermercado, adicionales al hotel “resultan afectando los valores patrimoniales y culturales que deben preservarse y protegerse por el Estado en los términos de la Constitución Política” y negó la nueva licencia.

Una de las protestas de Jero SAS es que para obtener la modificación, que la Alcaldía negó, tuvieron que presentar un estudio de tránsito en la zona a lo que la administración municipal respondió que “debido al impacto que generaría sobre el sector del barrio El Peñón la implantación de un centro comercial, supermercado y cuatro salas de cine, la administración solicitó, amparado en la norma nacional un estudio de tránsito que permitiera identificar medidas para mitigar los impactos en la movilidad del oeste de la ciudad”.

Esta fue la razón por la que la constructora solicitó ante la Procuraduría una audiencia de conciliación con la Alcaldía de Cali, posterior a la que podría entablar una demanda por la cual espera recibir cerca de $40.000 millones con responsabilidad directa de los funcionarios encargados de la gestión de patrimonio y de la misma Alcaldía.

Por su parte la Alcaldía señaló que tiene “la plena convicción (...) que las pretensiones del promotor, en caso que decida proceder a una instancia judicial, serán totalmente desestimadas por un juez de la República y se analizará si la demanda puede ser calificada como temeraria”.

Y agregó que lamenta “y advierte que los mayores perjudicados serán los terceros de buena fe que creyeron en el proyecto La Sagrada Familia y ahora estarán a la espera de un extenso proceso judicial mientras sus inversiones aguardan a que Jero SAS presente un proyecto que se adecúe al marco legal existente sobre los Bienes de Interés Cultural”.

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