Anif pide compromiso para agilizar la chatarrización

Para la Asociación Nacional de Instituciones Financieras, las medidas transitorias que han tomado las diferentes administraciones locales, como las restricciones de movilización a los vehículos tanto privados como de carga, no generan una solución de fondo que permita evitar que estas emergencias ambientales sean cada vez mas comúnes.

Dichas restricciones, según este centro de estudios, no solo dificultan la cotidianidad de la ciudadanía al no poder sacar sus vehículos particulares, sino que además afectan drásticamente las actividades de comercio y de construcción. Adicionalmente, aseguran que las principales fuentes de contaminación en las ciudades son los vehículos de carga y de transporte público que funcionan con diesel.

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En el caso particular de Bogotá,  entre el año 1998 y 2000, la administración de Peñalosa consideraba que los principales causantes de la contaminación eran los vehículos particulares, por tal motivo se dieron a la tarea de desincentivar sus uso y de implementar Transmilenio y otro tipo de movilidad alternativa como las bicicletas.

No obstante 20 años después, para la Anif es evidente que el origen de la contaminación no se encontraba en este segmento del sector privado, y hoy las personas que utilizan los nuevos sistemas de transporte como las bicicletas y las patinetas eléctricas, son las principales víctimas de la contaminación que genera el Sistema Integrado de Transporte.

Así mismo la Anif  pidió a las autoridades que se apliquen las normas y se detenga la circulación de buses y camiones que ya han cumplido con su vida útil, y que además no se permita que estos vayan parar a otras  ciudades pequeñas e intermedias.

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También le pidieron a Ecopetrol que mejore la calidad de sus combustibles y reconocen que si bien ha habido una mejoría, aun no se cumple con las normas internacionales que hablan de cifras inferiores a las 15ppm. Hoy en Colombia los combustibles en el mejor de los casos alcanzan unas 50 ppm.

Sin embargo, la calidad de los combustibles no es a única variable en la ecuación, pues en palabras de Anif “de poco-nada sirve mejorar la calidad del diésel si el parque de carga y de pasajeros promedia más de 15 años de antigüedad”.

Por estas razones le piden a las autoridades apliquen las normas y se detenga la circulación de buses y camiones que ya han cumplido con su vida útil y que además no se permita que estos vayan a parar a otras  ciudades pequeñas e intermedias.

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El centro de estudios finalmente espera que las medidas que piensa implementar el Ministerio de Transporte, en el marco del programa de modernización de vehículos de carga,  que busca  beneficiar al 56.000 transportadores en los próximos 5 años, permitan mitigar los altos niveles de contaminación que están viviendo las principales ciudades de Colombia y que están afectando la salud de millones de ciudadanos.