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| Foto: Getty

INFRAESTRUCTURA

Conozca las 10 concesiones 4G que tienen un avance de 0%

Corrupción, obras que se caen o se tuercen, bancos que dan la espalda, cuentas sin pagar a proveedores, quema de maquinaria y proyectos sin tener en cuenta la voz de las comunidades. Es necesario un cambio en el sector para devolverle el orgullo y la confianza a una talentosa industria.

3 de diciembre de 2018

No se puede tapar el sol con un dedo. Si las bases están mal diseñadas o se hicieron con materiales inadecuados, lo mejor es demoler y volver a iniciar la obra. Esa es la premisa básica la cumple la mayoría de ingenieros con sus obras. Y eso es lo que hay que hacer con el sector de la obra civil en Colombia.

Basta con revisar la segunda tabla que publicamos en este artículo, y que habla de cómo va la locomotora de la infraestructura en el país, sobre todo su vagón del 4G, para darse cuenta que las cosas no van bien. De 30 proyectos, solo 3 superan una ejecución de más del 50% y otros 10 presentan avance nulo, es decir, de 0%.

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Todos en el sector saben qué hay que hacer. Un avance importante es que el propio presidente de la ANI, Louis Kleyn, ya reconoce que hubo errores en la cuantificación de los riesgos y que es necesario corregirlos con figuras polémicas como los otrosíes.

El asunto es que eso no es suficiente, pues si no se solucionan de manera definitiva asuntos graves como consultas previas, predios, manejo de redes y licencias, de nada servirá seguir ampliando los contratos.

La otra gran apuesta será comprometer a las constructoras para que hagan bien su trabajo. Por las obras ejecutadas en el último siglo (hidroeléctricas, vías, aeropuertos y puertos) es posible atreverse a decir que la ingeniería colombiana no solo es capaz, también es muy buena. Es necesario apretar las tuercas.

La 4G y los demás programas de ingeniería se asemejan al concreto, si algo falla en la mezcla, todo se echa a perder.

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Nunca se había invertido tanto en infraestructura de transporte como ahora. Es la mejor inversión para reducir la inequidad y conectarse con el país que estuvo aislado por siglos por la violencia o las montañas. Es una oportunidad que estamos desaprovechando como Nación al no capitalizar nuestro escaso recurso económico.

Solo vean la tabla final en la parte inferior, en las columnas Avance y Financiación, verán que en más de 10 grandes proyectos no hay ni crédito ni un gramo de asfalto. A veces parece que tampoco hay vergüenza. Tampoco hay proyecto perfecto o libre de líos, siempre habrá algo. El asunto es gestionar y hallar salidas rápidas y eficientes que permitan que las obras no se detengan. Los ingenieros saben mucho de eso, por eso se llaman ingenieros.

Observen los presupuestos asignados o previstos (IP) en la primera tabla de este artículo. ¿Cuántas reformas tributarias hay ahí? Es un esfuerzo grande, y no solo de los gobiernos, también de la gente y empresas que paga sus impuestos y de lo que ofrece la madre naturaleza (rentas de petróleo y carbón). Antes de que se vuelva a enfriar la fiesta de los comodities, es necesario hacer un alto en el camino para reinventarse el sector, al menos para enderezarlo. 

La gente en este país se merece mejores vías, viaductos, túneles y obras. Los ingenieros las saben hacer y por estos días hay dinero para ejecutarlas, es hora de ponerse de acuerdo antes de que se pierda por completo la confianza.

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