ADRIANA MOLANO

#TestDePersonalidad: ¿Qué piensan las máquinas de mí?

¿Tiene claro que bastan 10 ‘likes’ para que los algoritmos puedan identificar su estado civil, su género o su ubicación?

Adriana Molano, Adriana Molano
6 de abril de 2018

Internet no sabe cuál es mi preferencia política ni tampoco conoce mi vida sentimental, pero cree saber que me encanta comer y que los gimnasios no son lo mío. No he publicado nada de esto, pero tampoco es por mi silencio que asume quién soy. El nombre del juego es cognitiva y viene a cambiar la forma en que tomamos decisiones.

Watson es el sistema cognitivo de IBM, que tiene como propósito desarrollar procesos de aprendizaje y de acompañamiento en la toma de decisiones en ámbitos tan amplios como la medicina o el reclutamiento de personal. Una tecnología capaz de emular procesos de pensamiento que está demostrando su efectividad a medida que se adopta en más organizaciones y se le enseña adecuadamente.

Con el reciente escándalo de Cambridge Analítica y el análisis de perfiles personales con propósitos de marketing político, salió a relucir la posibilidad de que los algoritmos recreen perfiles de usuarios y además prevean los intereses y gustos de sus dueños basados en algunos ‘likes’ y la información con la que interactúan. Pero ¿qué clase de perfiles estarán creando de usuarios que, como yo, deliberadamente no hacemos públicas algunas de nuestras preferencias?

Mi decisión sobre qué publicar o qué no – así como a qué darle ‘like’ – responde a un asunto de construcción de identidad digital basado en una mínima conciencia sobre los alcances que tiene la información en línea (tampoco es que te tenga mucho que ocultar), por eso siempre resulta curioso saber qué piensan de mí las máquinas.

Visite: El riesgo es que el usuario no se quiera quedar

Personality Insights de IBM es una herramienta que usa la tecnología cognitiva para identificar rasgos de carácter basados en el análisis de las publicaciones en redes sociales o incluso, fragmentos de texto escritos por una persona. Simple, rápido y sorprendentemente acertado, el ‘retrato de personalidad’ que entrega la herramienta suele tener grandes aciertos.

Para los reclutadores, la herramienta es soñada porque les ahorra horas de test psicológicos para saber los intereses de los candidatos a una posición; para los ‘stalkers’ es la puerta a la profesionalización del seguimiento en línea.

¿Quiere hacer la prueba? Si va a analizarse a usted mismo, enlace sus redes sociales y reciba un perfil detallado; si va a perfilar a alguien más, tome un texto medianamente largo que esa persona haya publicado en algún lugar público, péguelo en el lugar que indica el análisis de texto y de clic.

Ante sus ojos se abrirá no solo un resumen de personalidad que incluye la identificación sobre a qué es más o menos propenso: dejarse influenciar por su familia en las decisiones de compra o ver películas musicales, por ejemplo. También podrá consultar una serie de tablas que muestran el grado en que tiende a ser amable o práctico, a preocuparse por la autotrascendencia y hasta a ser hedonista. De regalo, puede ver un gráfico circular que muestra en qué porcentaje usted goza de ciertas características. (Todo esto es el paquete abierto, imagínese las posibilidades si comprara la herramienta).

Recomendado: El volocóptero y otros vehículos voladores que no nos llegarán

Mi retrato de personalidad dice que me gusta comer afuera y que es poco probable que esté inscrita a un gimnasio. Acertó con lo de la comida, pero no sabe que intento nadar un par de veces por semana.

El rastreo de datos de Facebook arrancó con un inocente ‘test de personalidad’. Este es otro tipo de test, basado en lo que ya es público de nosotros y enmarcado en la confianza de que IBM no vive de la pauta.

Todos somos dueños de nuestra información personal, por lo menos hasta que decidimos publicarla en línea. ¿Hasta dónde lo conocen las máquinas?, ¿qué tanto más quiere que sepan de usted?