OPINIÓN ONLINE

Petróleo y el crecimiento económico de Colombia

Colombia necesita desarrollar otros sectores porque sostener la inversión en construcción e infraestructura es coyuntural y depende fuertemente de los ingresos de la Nación.

Invitado
30 de enero de 2016

La aceleración de la economía de China con crecimientos anuales cercanos al 10% permitió que la demanda por materias primas se expandiera considerablemente, a ese ciclo se sumó la expansión de India que tuvo un crecimiento anual cercano al 6% durante varios años. El crecimiento combinado de esas dos economías con las demás economías emergentes derivó en un ciclo de precios elevados de las materias primas.

Durante ese ciclo los países productores vivieron una época de bonanza caracterizada por un aumento significativo de la inversión extranjera destinada a la explotación de esas materias primas y por el incremento del valor de sus exportaciones. Esas circunstancias dieron paso a la abundancia de divisas en los respectivos mercados cambiarios que sirvieron para pagar los presupuestos públicos, unos mejor invertidos que otros (véase Venezuela y Argentina vs Perú, Brasil, Ecuador, y Chile) y financiar los déficit fiscales y de cuenta corriente.

La contrapartida del favor que estaba haciendo la bonanza de divisas fue la apreciación de las monedas frente al dólar americano, la pérdida de competitividad de las exportaciones no tradicionales, incremento de las importaciones debilitando la balanza comercial y disminución de la participación de la industria en el PIB.

Las condiciones de la economía internacional han cambiado. China pasó a crecer al 6,7% anual y varios analistas consideran que la cifra real es el 4,5% o máximo el 5%, el crecimiento de India ronda el 7%, mientras que las economías desarrolladas no despegan. Por ejemplo, Estados Unidos a pesar de una política de expansión monetaria que lleva siete años porque la tasa de interés en diciembre subió a solo 0,25% reportó ayer que su economía se desaceleró en el cuarto trimestre y creció un 0,7%, los pronósticos del FMI para Europa son un crecimiento del 1,7% para este año pero con riesgos asociados a una persistente baja inflación.

Bajo ese nuevo escenario, Colombia ha visto sucederle lo opuesto a la época de precios altos del petróleo y abundancia de divisas, el peso se depreció y ahora hay que entregar $3.300 por dólar lo que llevó la inflación de 2015 al 6,7% y el valor de las exportaciones petroleras cayó 44%. Pese a que la producción de crudo estuvo por encima del millón de barriles, como ahora llegan menos divisas, el déficit en cuenta corriente va camino a ubicarse en US$18.000 millones o 6,2% del PIB. Según proyecciones del Banco de la República, la balanza comercial presenta un déficit de US$ 9.782 millones y así mismo la inversión extranjera directa bajó a US$9.325 millones, es decir un 26%.

Con precios del crudo en niveles de US$30 por barril, la estrategia acogida por el Gobierno ha sido impulsar la construcción de obras civiles con el plan de autopistas 4G y la construcción de vivienda, para lo que dispuso una ronda de subsidios a la tasa de interés por $1,2 billones. Esa estrategia no tendría nada de malo si no fuera porque depende fuertemente del ingreso del Estado para gastar en momentos donde el déficit es amplio y es indispensable recortar el gasto, además ese impulso al crecimiento se da por una sola vez mientras se hacen las obras.

Otra vez, igual que finalizando el 2014, da la impresión de que el Gobierno está confiado en que los precios del petróleo subirán pronto. Seguramente lo hace creyendo en el repunte de esta semana por los rumores de acuerdos para disminuir la producción, pero: ¿Qué pasará si Rusia e Irán no llegan a un acuerdo con su rival político y de la industria, Arabia Saudita? ¿Hasta dónde Irán recortará producción después de años de sanciones y cuando ha ido en busca de inversión a Europa? ¿Qué pasa si Estados Unidos mantiene la producción y entrega suministros a Europa occidental como antes lo hizo? ¿Estará Rusia dispuesta a perder cuota de mercado en Asia y Europa para buscar alza en los precios?.

Por último con reservas de petróleo para 6 años y una Ecopetrol endeudada porque las campañas de exploración se financiaron con deuda y no con utilidades, ¿podrá el Gobierno seguir extrayendo rentas desde la empresa, o tendrá que dejar que invierta sus utilidades en sumar reservas antes de que estas se agoten y el país tenga que comprar crudo a precios internacionales?. Son preguntas que evidencian que habrá que impulsar otros sectores para mantener el crecimiento.

Vea también:  ¿Cómo llegó Colombia a un déficit externo de  US$14.469 millones?