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Los sectores productivos que queremos internacionalizar

¿Cómo se eligen los sectores que se quieren promover en un país? ¿Se deben tener políticas que afecten muchos sectores, o buscar un enfoque vertical? Opinión de Maria Alejandra Gonzalez-Perez.

Dinero
18 de febrero de 2013

En cuanto al diseño de políticas comprometidas con aumentar el nivel de desarrollo económico de un país, se requieren análisis locales, nacionales, regionales e internacionales profundos.

Existe en Latinoamérica una tendencia a enfocar el desarrollo de los países en los mismos sectores, lo cual debe alertarse debido a que en algunos casos se ignoran las demandas de los mercados domésticos, y la estructura de la demanda internacional de estos productos y servicios puede variar. El Dr. Ricardo Haussman profesor de economía del desarrollo del Harvard Business School, propone que se deben crear políticas enfocadas a apoyar los sectores más avanzados, y con mayores niveles tecnológicos más avanzados. Es decir, buscar primero desarrollar lo que hace ya muy bien, y posteriormente pasar a otros sectores.

Del 4 al 22 de Febrero 2013, se lleva a cabo en la Universidad Eafit en Medellín la vigésima sexta versión del curso regional en la agenda económica internacional de La Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (Unctad). Este curso conocido como el párrafo 166 del mandato de Bangkok en el año 2000, en donde las Naciones Unidas (ONU), identificaron la necesidad de entrenamientos regionales en políticas macro-económicas, tendencias económicas, y debates en cuanto al desarrollo. En esta versión participan 19 diplomáticos de 13 países de América Latina y el Caribe.

La Unctad fue creada en el año 1964 en el contexto de la descolonización y la creación del movimiento de los países no alineados. La Unctad es una agencia que hace parte de la Asamblea General de la ONU, y de la cual hacen parte los 194 Estados miembros. A diferencia de la Organización Mundial del Comercio (OMC), y el Fondo Monetario Internacional (FMI), la UNCTAD tienen como miembros todos los países que hacen parte de la ONU, y en el cual se busca tener un foro intergubernamental de discusión anterior y posterior a las negociaciones ante la OMC, buscando incluir en la discusión las características y los intereses de los países en vía de desarrollo, en lugar de ratificar la adopción de formulas únicas de desarrollo económico. Para lograr este fin, la Unctad tiene como uno de sus pilares el proveer de cooperación y asistencia técnica en temas de comercio y desarrollo, para lograr escenarios en el comercio internacional de interdependencia conducente al mutuo desarrollo, y fortalecer la gobernabilidad económica global. Pese a su importancia, en el análisis y la formación técnica de formuladores e implementadores de políticas nacionales e internacionales, la Unctad no tiene una responsabilidad, ni una influencia formal en la economía internacional.

El primer Secretario General de la Unctad fue el economista argentino Raúl Prebisch (1901-1986), quien anterior a este cargo había ocupado la Dirección de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para América Latina y el Caribe (Cepal). Prebisch escribió en 1949 “el desarrollo económico de la América Latina y algunos de sus principales problemas”. Este documento es conocido en algunos círculos económicos como el “manifiesto latino americano”. Prebisch postula el modelo de desarrollo basado en la industrialización por sustitución de las importaciones (ISI) influyendo el desarrollo de América Latina y el Caribe; modelo que sucede al modelo primario exportador asociado al fomento de crecimiento económico acelerado.

Prebisch en la Secretaria General de la Unctad, logró que se incorpore a las Naciones Unidas conceptos y posiciones hacia un orden económico internacional incluyente y más justo en donde se tengan en cuenta las perspectivas de los países en busca del desarrollo.

La Cepal plantea que para que el modelo primario exportador sea un motor de desarrollo se requiere una interconexión entre la naturaleza de las exportaciones (que se exporta), el marco/contexto social, y contar con un Estado con un rol regulador de aspectos macro-económicos. Adicionalmente, como lo sugiere el Dr. Alfredo Calcagno de la Unctad “se requiere que las exportaciones sean ligadas a eslabonamientos nacionales, regionales e internacionales, y buscar interrelaciones sociales y productivos”.

Para ilustrar esta situación, se puede ver como los países ricos en recursos naturales tienden a crear enclaves orientados a las exportaciones con limitados encadenamientos y pocas ganancias productivas. Sumado al hecho de la volatilidad derivada de las ganancias de la exportación de commodities; y a la concentración en pocas manos de las estas.

Es por esto, que pese a que se conoce internacionalmente como la “la maldición de los recursos naturales”, en algunos casos como lo expresa Andrés D’Albora Prina del Ministerio de Agricultura de Uruguay, “tal y como ocurrió en la Gran Bretaña y Estados Unidos, los recursos naturales pueden ser una bendición. Inglaterra logró la revolución porque tenía carbón, y Estados Unidos usó los recursos para crecer”.
Chile ha sido un país en donde la explotación y exportación de salitre y cobre estuvo ligado a un desarrollo del país. Esto se logró, puesto que el Estado chileno estuvo en capacidad de generar ingresos por impuestos, representando estos impuestos la mitad del presupuesto nacional durante décadas, contribuyendo ampliamente a la financiación de los proyectos de infraestructura.

Ecuador es un país en donde se han identificados tanto sectores estratégicos, como sectores priorizados. Los sectores estratégicos como lo explica la analista de relaciones internacionales de Senplades en Ecuador, Pamela Bernarda Torres Castillo, “los sectores estratégicos identificados en Ecuador, son aquellos los cuales se han determinado que tienen un efecto multiplicador en la economía. Y los sectores priorizados, son los que se busca desarrollar, por ser identificados como sectores en los que se cuentan con ventajas, y son potenciales creadores de empleos de buena calidad”.

* (PhD) Directora del Grupo de Investigación en Estudios Internacionales. Universidad EAFIT.