Las tres decisiones del poder

Toda persona que ha tenido éxito en cualquier área de la vida ha tomado las siguientes 3 decisiones:

 1. Definir sobre qué enfoca sus pensamientos

Las personas que tienen éxito cada día deciden sobre qué enfocar sus pensamientos y a esto es lo que yo he llamado el poder del enfoque. Es increíble ver cómo el enfoque determina la emoción y esta la acción y esta a su vez los resultados que ellos obtienen día tras día. Es impactante ver como muchas personas normalmente se enfocan en lo que no quieren, por ejemplo: no tengo el salario que quiero, no tengo el carro que quiero, no estoy en el trabajo que quiero, no quiero…no quiero… está claro lo que no quiere.

Ahora, en esencia ¿qué quiere? Y en este punto es fascinante ver como los mejores mantienen el enfoque sobre lo que quieren. En sus pensamientos solo están imágenes de éxito, triunfo, resultados y lo han logrado controlar de una manera tal, que están condicionados. Esto significa que rara vez ellos pierden el enfoque y cuando esto sucede se reencuadran  de una manera muy rápida entendiendo el impacto que este tiene sobre el resultado final.

Ahora bien, ¿qué controla nuestro enfoque?

En este instante le voy a pedir que enfoque todos sus pensamientos en cada momento donde ha logrado obtener un resultado. Traiga a su mente esos momentos, observe lo que observó en ese momento, escuche lo que escuchó en ese momento y sienta lo que sintió en ese momento. Le pido que lo haga de forma detallada.

Ahora quiero que sea consciente de lo que siente ahora, cómo respira, qué sucedió con su rostro, sus posturas, le podría garantizar sin verlo que ha cambiado su emoción en este instante ¿no es verdad?

Ahora le voy a pedir que haga lo contrario, que enfoque sus pensamientos en las últimas veces donde no se le han dado los resultados. Recuerde con detalle esos momentos usando la misma estrategia del ejercicio anterior, ¿qué sucedió ahora con sus posturas, sus gestos y su estado de ánimo?

A esto es lo que llamo nuevamente el poder del enfoque.

2. Definir qué significado le atribuye a estos pensamientos

Esta segunda decisión es fundamental: la manera como interpreta lo que le sucede, recuerda un principio básico de Neuroemotion, determina la manera como se comporta. Si recibe un “no” de parte del cliente ¿sobre qué enfoca su atención? ¿es el final de la venta o es el inicio? Si no logra un objetivo que se ha trazado, ¿qué preguntas se hace a sí mismo?, ¿qué significado atribuye a ese momento?, en esencia, ¿cómo se siente?.

Entonces la manera como haya interpretado esa experiencia, determina la forma como se sentirá. Personas de éxito simplemente le atribuyen a esos momentos lo que le deben atribuir, basando todo su comportamiento en la siguiente creencia “los fracasos no existen, solo existen resultados” entonces son personas que después de este tipo de situaciones se enfocan de nuevo sobre la meta a alcanzar, obteniendo lo mejor de la anterior y para eso se plantean preguntas como: ¿qué me falto a mí para lograr el objetivo? Esto hace que estén en un proceso de mejoramiento continuo acercándose cada día a la excelencia, entendiendo que esta es un hábito.

3. Definir qué hacer para lograr sus metas

Aquí hacemos referencia a que puede estar muy enfocado y darle un significado real a sus pensamientos, sin embargo no emprende acción. En este punto es donde debe decidir actuar “muévase” siendo esto un aspecto  fundamental para lograr sus resultados. El mejor consejo que le puedo dar ahora es que no pertenezca al grupo de personas que hablan mucho y hacen poco, pertenezca al selecto grupo de personas que habla poco y hace mucho. Acción masiva es la clave, actuar, actuar y actuar…. "Muévase", hasta  lograrlo.

Lea también: Pensamiento estratégico y las 8 fuerzas del éxito sostenible

D: Decisión

A: Acción

C: Compromiso