OPINIÓN ONLINE

La analítica en manos equivocadas

Si bien hemos dicho que la analítica de los datos ha modificado la manera en la que podemos tomar decisiones inteligentes, su uso en manos equivocadas puede traer graves problemas, especialmente en lo referente a la seguridad de la información.

Christian Onetto
17 de agosto de 2016

La avalancha de datos e información que ha traído la que hemos denominado la cuarta revolución industrial ha abierto hoy día un abanico de oportunidades para todas nuestras compañías, sobre todo en lo referente a conocer a nuestros clientes y anticiparnos a hablar con ellos de lo que de verdad les interesa.

Sin embargo, ese gran cúmulo de información también nos ha obligado a poner la lupa en las fisuras del mundo digital, especialmente en la protección de los grandes volúmenes de datos, que, en muchas ocasiones, representan la confianza y cercanía con nuestros clientes.

Dichas brechas están representadas en lo atractivo que se ha vuelto ese gran activo para las cada vez más sofisticadas maneras de ataque virtual, de las que algunas incluso cobran rescates por información filtrada o robada (ransomware), o de otras que dañan nuestras bases de datos y dejar en el suelo nuestra capacidad de tomar decisiones inteligentes a través de dichos datos.

Es por esto, que la analítica de datos en las manos equivocadas puede convertirse en un riesgo para el corazón de nuestro negocio, teniendo en cuenta que si nos interesa involucrarnos con este tipo de herramientas o soluciones, como lo llaman los proveedores, debemos garantizar su manejo y conservación. 

El llamado de atención fue dado en el Reporte de Ciberseguridad de la tecnológica Cisco para la primera mitad del año 2016, en el que se encontró que en la actualidad las organizaciones no están preparadas para enfrentar las nuevas formas más sofisticadas de ataques a la seguridad digital, especialmente el ransomware.

Factores como una infraestructura frágil, la falta de mantenimiento en las redes y lentitud en los rangos de tiempo de detección, están dándole una ventana de tiempo y espacio a los adversarios para que operen, lo que se agrava cuando el manejo de los datos usados en analítica no es el correcto.

El mismo informe prevé que tendencias como el ransomware continúen con programas aún más destructivos expandidos en redes completas y que conviertan a compañías enteras en rehenes; empresas que van desde las pequeñas, hasta las grandes multinacionales, que no han visto en las fisuras digitales un problema para preocuparse.

Esta situación ha hecho que la lucha para mantener los espacios operativos libres de ataques se transforme en el desafío más grande que están enfrentando los negocios en la actualidad, amenazando a su vez los fundamentos requeridos para una transformación digital.

La advertencia está en que, mientras los atacantes innovan, muchos de los defensores continúan luchando para mantener la seguridad de sus equipos y sistemas. Y está claro que los sistemas que no tengan soporte o no estén actualizados están ofreciendo a los atacantes oportunidades adicionales para tener acceso más fácilmente, permanecer sin ser detectados y maximizar los daños y las ganancias obtenidas.

Por este motivo, mientras que las organizaciones se están capitalizando en nuevos modelos de negocio presentados por la transformación digital, velar por la seguridad es fundamental, así como hacer un uso correcto de los datos capturados para tomar decisiones inteligentes.

Todo un reto que debemos hacer con una premisa: dejar la analítica en las manos correctas.