RAÚL ÁVILA FORERO

Disrupción Tecnológica

Netflix es el mejor ejemplo para ilustrar el fenómeno de las tendencias disruptivas a nivel mundial. Sin embargo, el mercado de las plataformas de streaming solo es una pequeña parte que demuestra el monumental impacto de esta estrategia de posicionamiento de contenidos globales.

Raúl Ávila Forero, Raúl Ávila Forero
4 de noviembre de 2019

Dentro de los temas cruciales que se mantienen en el día a día de las organizaciones, la preocupación por mantenerse en juego y vigente dentro del mercado sin morir en el intento, es uno de los que más toma relevancia. Y no es para menos cuando se tienen que someter diariamente a los cambios y mejoras de una competencia más preparada, flexible y receptiva a las tendencias que se generan en diversos tipos de industrias.

De hecho, mantenerse como el número uno del ranking en una industria requiere de un amplio trabajo, en el que diariamente se incluyen estrategias de renovación, innovación y/o disrupción. Mientras la primera se basa en un restablecimiento de marca en una categoría, la innovación demanda la creación de nuevas subcategorías. Pero cuando se habla de disrupción, esto involucra todo un revolcón que cree no solo una nueva categoría, sino también un nuevo mercado que satisfacer. 

Cuando departimos de la era digital, la disrupción no es un fenómeno ajeno a ella. Gran parte de las industrias que lideran hoy día en la industria tecnológica, lo han logrado gracias a estrategias disruptivas que revolucionaron y reconfiguraron, tanto el comportamiento como los actores del mercado. Así se hicieron espacio en varias industrias, incluso en aquellas en donde la demanda parecía ser atendida.

Con esta noción de la disrupción como resultado de esta era digital, Euromonitor International recopiló seis áreas clave del mundo comercial en donde las tendencias disruptivas hicieron de las suyas para transformar de pies a cabeza las nociones tradicionales en estos espacios de consumo.

El área más representativa ha sido la prestación de servicios de streaming. De acuerdo al estudio, el 72% de las personas usan teléfono móvil para ver televisión o videos online al menos una vez a la semana. Por ende, el gasto en streaming ya alcanza los USD$ 108 billones.

Y aunque Netflix es la compañía que resalta en esta industria, también existe un amplio repertorio de tipos multimedia como música, televisión y videos. No obstante, algunos servicios como los de Spotify y Apple Music dependen de las licencias de contenido, mientras que otros como Netflix e Icflix (plataforma para el Medio Oriente) vienen dependiendo cada vez más de producciones originales. Por ahora, Netflix ya alcanza el 15% en penetración al mercado colombiano con una de las suscripciones más económicas comparativamente a nivel global.

El segundo mercado que la disrupción digital ha logrado transformar, ha sido los servicios de entregas a domicilio de comida. Los métodos de entrega se están volviendo más rápidos y sofisticados, ofreciendo el servicio completo desde la toma de una orden hasta la simple entrega del domicilio (tal y como lo hace Uber Eats o Domicilios.com en Colombia). Esto ha llevado a que las ventas por este concepto se hayan incrementado del 2,6% en 2014 al 6,9% en 2019, del total de ventas de alimentos.

En tercer lugar, están las plataformas de movilidad compartida, es decir, servicios que prestan aplicativos como Uber, Cabify, Didi, Picap o Beat. Sus ventajas en la relación costo-efectividad hacen muy útil esta opción para usuarios que no encuentran una satisfacción en el transporte público o en la contratación de taxis privados. Gracias a su practicidad y facilidad de uso, en cinco años Uber por ejemplo ya supera los 2,3 millones de usuarios en Colombia.

La cuarta tendencia disruptiva, y de la cual cada vez somos más usuarios, son las carteras o billeteras virtuales, las nuevas alternativas para uso del dinero plástico. En esto, el incremento en uso de los smartphones ha incidido en una mejor adopción de esta modalidad virtual como método de pago. Y aunque la tendencia está al alza, el Banco de la República afirma que Colombia aún es un país que prefiere el efectivo, pero con un avance cada vez más fuerte en la materia.

Los dos mercados restantes hacen referencia a las plataformas virtuales para la entrega de bienes, como Rappi, y las plataformas de redes sociales, como Facebook. Ambas ofrecen soluciones rápidas, una para entrega inmediata, y otra para facilitar no solo la comunicación y las relaciones sociales, sino también un mayor contacto entre compañías y clientes a través de la publicidad masiva.

Estos seis ambientes en los que se desenvuelven gran parte de los clientes, de diversas generaciones, solo son ejemplos del gran impacto que pueden tener las tendencias disruptivas. Los mercados se mueven a un ritmo tan acelerado que lo que es tendencia hoy, puede que no sea tendencia mañana. Por ende, es clave que cada una de las organizaciones, sin importar su core, entiendan la importancia de mantenerse a la vanguardia, y de no dejar de reinventarse. 

Según la Asociación Colombiana de Ingenieros (Aciem), los desarrollos en electrónica serán los que soporten la incidencia de las tecnologías disruptivas en Colombia en temas de control de procesos industriales, sistemas electrónicos de potencia, microcontroladores, microprocesadores y hasta en el apoyo en el diseño de software. La electrónica sería, entonces, la estructura fundamental de la nueva fase de desarrollo de las TIC.

Así, se estima que nuestro país podría importar cerca de los USD$ 35 mil millones en productos electrónicos durante los próximos cinco años. Un aspecto que podría incentivar el desarrollo de políticas para estimular esta industria a nivel local, de tal forma que se eleve el potencial del país para insertarse en las cadenas de valor mundial. Pero con la falta de una institucionalidad fuerte en la materia y un marco legal robusto, este particular propósito parece lejano.