CLAUDIA VARELA

Construye tu vida, no tu marca

El tema de la marca personal está de moda. Hay tutoriales, estrategias y cursos que hablan de cómo hacer una marca personal exitosa, cómo crearla, hacer negocio y vivir de ella.

Claudia Varela, Claudia Varela
9 de septiembre de 2018

En otras épocas quizás se decía “crea fama y…” ahora se trata de controlar la propia imagen, de hacerla útil para fines de marketing personal y del logro de los objetivos estratégicos de cada individuo.

Lo primero para conseguir una buena marca personal es pensarse cada uno como un producto o servicio, por tanto hacer un proceso serio de elaboración, transmisión y diferenciación.

Hasta aquí creo que no estoy diciendo nada considerablemente diferente. La reflexión real está en cómo ser consistente en lo que proyecto y lo que soy. Podríamos hablar de un yo real y un yo percibido, al final normalmente no es igual porque hay una brecha entre lo que creo que soy y lo que realmente la gente ve, percibe y lee de mi a través de mis acciones.

Creo profundamente en la necesidad de hacer lo que el corazón manda. Pero muchas veces me asaltan dudas de si lo genuino al 100% resulta ser bien leído por las organizaciones. Si la diferencia de estilo es más bien leída como “no hay un fit cultural”.

Le puede interesar: Busco apasionados comprometidos con su sueño

He encontrado grandes inconsistencias en la marca personal de muchos ejecutivos que he conocido en mi camino. Creo que tal vez no hubo un intento planeado y estratégico de construcción de una marca personal, pero al final la marca o la percepción existe.

Conocí alguna vez a alguien con una posición super importante que trabajaba teóricamente muy fuerte en la equidad de sus equipos y en ser “transparente” con sus colegas. Se vendía como alguien tremendamente frentero y hasta era algo agresivo a veces cuando sus colegas no estaban. Pero al momento de confrontar a un jefe o sentarse a una mesa de discusión de trabajo se volvía el eco de sus jefes. Jamás les contradecía.

Para mí, que soy una defensora de las causas justas y el fair play, me parecía absolutamente inconsistente. Sin embargo, esta persona sigue en un cargo altísimo en otro país, su marca personal para mí es fatal porque conocí lo que hay tras bambalinas, pero para la corporación su perfil es increíblemente bueno y exitoso. Entonces me entra la duda: ¿su estrategia de marca es exitosa?

Lamentablemente (según yo misma) tengo que decir que sí es exitosa. Le va bien, está haciendo lo que siempre quiso y si medimos el éxito en lujos, pues tiene una marca personal ganadora.

Lea también: Mi estrategia es que por fin me necesites

Estaríamos llegando a que la marca personal, el yo percibido dentro de una estrategia de negocios podría ser customizada, dependiendo de lo que el otro busque o quiera. Es decir que usando un poco la lógica y contra mucha de la teoría, puedo tener varias marcas personales dependiendo de mi cliente.

Yo sigo creyendo en que ser espontáneo y genuino dentro de una estrategia de vida y relacionamiento con el mundo debería ser mas que suficiente. Al menos si el tono cambia de acuerdo con el ambiente hay variables que deben ser innegociables. Las que cada quien decida, no voy a juzgar, pero creo que la palabra consistencia debe ser lo que distinga tu marca personal.

Si creo en la verdad y no en la doble moral, si creo en ser buena de base y no en llevarme al mundo por tarea, si creo en que el universo es compartido y no solo mío, si creo que hay más propósito que llenar mis bolsillos, si creo que divertirse es una máxima en la vida, pues lo hago y con mi existencia estaré fundamentando una estrategia personal, no solo una marca.

Cuando consumo soy leal a las marcas que son consumibles, que me gustan, que me dan alegría, placer, a las marcas a las que les creo…. Si tu fueras un producto, ¿qué marca serías? Arranca por la consistencia y haz lo que te plazca. Construye tu vida no tu marca… sin edad ni status, ¡nunca es tarde ni temprano para hacerlo!