Claves del autopoder

Soy un firme creyente en la capacidad motivadora de las frases inspiradoras, ya que las palabras tienen poder y leer conceptos potentes nos ayuda a superarnos y a tener resiliencia y esperanza para conseguir nuestros objetivos profesionales. Uno de esos conceptos que leo a diario es lo que Deepak Chopra denomina el secreto del poder personal, que resumidamente consiste en: ser inmunes a las críticas y a los halagos, no pisar a nadie impidiendo también que nos pisen, e ir por la vida sin miedo.

Por ello, me parece interesante traer a colación un artículo que el propio Chopra escribió en el que precisamente habla sobre cómo encontrar tu poder personal. Es decir, desarrollemos la idea expuesta al principio.

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La mayoría de las personas no han experimentado el poder personal por tener una idea equivocada de lo que significa. Definen a una persona poderosa como alguien con dinero y estatus que puede ejercer su voluntad sobre los demás. Se imaginan que una persona así es fuerte, inteligente, afortunada y un poco despiadada. Los ejemplos surgen en cualquier área de la vida donde la competencia es feroz y el botín de los negocios se lo quedan los tiburones.

Pero el verdadero secreto del poder personal está en otra parte. La diferencia es que el poder recientemente expuesto proviene de lo que haces, mientras que el poder personal emana de lo que eres. Según Deepak, éstas son las cualidades que ha observado en las personas más poderosas que ha conocido:

- Han construido una vida llena de significado y propósito.

- Son capaces de realizar sus intenciones.

- Dirigen su atención con eficiencia y enfoque.

- Sus decisiones benefician tanto a ellos como a las personas a su alrededor.

- Están llenos de creatividad, imaginación y percepción.

- Pueden sentir las situaciones a través de su acertada intuición.

- Sus logros no los llevan a la autosuficiencia: la humildad y la gratitud están presentes.

- La vida es una fuente continua de alegría para ellos, no un campo de batalla de lucha y frustración.

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No todas las personas poderosas exhiben estas cualidades todos los días, hay que dejar espacio para el crecimiento personal y para las diferencias personales. Sin embargo, no importa cuán únicos seamos cada uno de nosotros, compartimos una fuente común en la conciencia de la cual surge todo el poder personal. Una vez que se haya contactado con esta fuente, se puede acceder a las cosas más valiosas de la vida de forma natural: amor, compasión, fortaleza, sentido de la verdad.

El tipo de poder que estamos describiendo no es fruto del éxito mundano, está en la fuente de quién eres. ¿Cómo reconoces si estás accediendo a tu propio ser? Pregúntate si estás a la altura de los siguientes rasgos:

- ¿Soy inmune a las críticas pero reacciono positivamente a los comentarios?

- ¿Siento que no soy inferior ni superior a nadie?

- ¿Me siento sin miedo?

- ¿Estoy defendiendo mi propia verdad?

- ¿Me encuentro en compañía de aquéllos que buscan la verdad?

- ¿Existe respeto mutuo con las personas que me encuentro?

- ¿Siento el tipo de cortesía que viene del corazón?

- ¿Sé cuándo diferir y cuándo hacerme valer?

Estas piedras filosofales son las más valiosas, ya que me dicen que estoy conectado a lo que realmente soy, mi verdadero “yo”, a diferencia de la imagen que proyecto y de las etiquetas que otros me ponen. No siempre es fácil permanecer conectado al "ser", hay que dejar espacio para el autoperdón y tener una gran tolerancia con los errores. El tipo de autopoder que tiene sus raíces en el "ser" y no en el ego es inconfundible y profundamente satisfactorio. Cuando te acerques a este enfoque, te habrás convertido en un auténtico líder sin darte cuenta.