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Bilateralidad productiva entre Colombia y Estados Unidos. Retos y más retos

A cierre de año se desarrolló una importante iniciativa empresarial que beneficiará a Colombia y EE.UU. en su crecimiento productivo nacional y en su relación bilateral. El reto es volverla una oportunidad sostenible en el tiempo, que supere adversidades por contextos sociales y políticos actuales.

Raúl Ávila Forero
16 de diciembre de 2016

La difícil coyuntura política y que en términos económicos podría avizorarse para Colombia con los nuevos lineamientos de gobierno en Estados Unidos a través de Trump y su política económica, pone sobre el tapete la rápida capacidad que la gestión a nivel de firmas debe desarrollar para mantener oportunidades de negocio con la economía más importante del mundo. 

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A nivel interno, Colombia mantiene importantes retos a superar para promover el crecimiento de sus sectores productivos. Ante ello, una de las relaciones estratégicas más importantes que debe mantener para impulsar su sector empresarial es con Estados Unidos, buscando mejorar día a día aspectos como mayores flujos de inversión y la diversificación de mayores bienes exportados, algo que no se ha logrado al nivel esperado y que se forja determinante como oportunidad de ampliar mercado.

Bajos estos lineamientos, a inicios de diciembre se consolidó el primer Consejo Empresarial entre Colombia y Estados Unidos en la ciudad de Cartagena, con el objeto de buscar iniciativas del sector público y privado de ambos países, para fomentar el desarrollo de cada nación, en ámbitos sociales y económicos, así como el fortalecimiento de esta relación bilateral. La idea es que el Consejo se instale de forma permanente, trascendiendo los diferentes periodos de gobierno que enfrenten ambas naciones.

El punto fundamental sobre el que se asienta este consejo es el Tratado de Libre Comercio que tenemos vigente con Estados Unidos, que ha logrado que más de 2000 empresas colombianas exportaran al mercado estadounidense; así, este órgano asesor buscaría aumentar la participación de las exportaciones, ampliar la oferta laboral, promover la inversión y el crecimiento económico, y establecer políticas que faciliten la materialización de las recomendaciones que se brinden. Por ello, es necesaria la participación activa de representantes del sector público y privado para brindar una integralidad, utilidad y viabilidad en las propuestas.

Tal importancia tuvo la instalación de este primer Consejo que cabe resaltar los actores que fueron partícipes en esta primera sesión. La representación del Gobierno nacional estuvo encabezada por el presidente Juan Manuel Santos y la ministra de Comercio Industria y Turismo, María Claudia Lacouture. Por el sector empresarial, estuvieron representantes de Nutresa, Alpina, Argos, Corona, entre otras firmas.

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Por su parte, Estados Unidos tuvo como figura de Gobierno al vicepresidente, Joe Biden, y miembros del Departamento del Tesoro y Comercio quienes participaron de la extensa comitiva que discutió aspectos de inversión, turismo, tecnología, educación y cambio climático. Igualmente, se hicieron partícipes importantes líderes de reconocidas empresas como Dow Chemical, Coca-Cola, National Geography Society, Goldman Sachs y Citigroup, como las compañías más representativas.

Por ahora, este acuerdo institucional se visualiza como una posibilidad de establecer lazos de cooperación empresarial entre Colombia y Estados Unidos, motivados por el aprendizaje mutuo. Particularmente, para Colombia es una excelente oportunidad para mantenerse a la vanguardia en temas de relevancia para su desarrollo y progreso, como los que se tocaron en la sesión pasada. No sólo sirve para fortalecer acuerdos entre las grandes empresas que forman parte del Consejo, sino que es oportunidad para la consolidación y fortalecimiento de las empresas más jóvenes que buscan el crecimiento nacional e internacional.

Asimismo, se planea un apoyo institucional para que la Asociación Nacional de Industriales (Andi) y la Cámara de Comercio de Estados Unidos jueguen un rol trascendental para que la iniciativa sea sostenible en el tiempo. La idea es que el Consejo sesione de manera anual, para que la actualización de la agenda se diseñe bajo aspectos que conciernan a ambos países y que contribuyan al desarrollo de los mismos.

Bajo un panorama actual, el escenario de postacuerdo, paz y reforma tributaria generan bastante incertidumbre en el sector empresarial, afectando sus expectativas de crecimiento. Con la instalación de este Consejo Asesor se pretende aumentar las oportunidades para todos los sectores empresariales con una ventana al mayor mercado mundial, en donde los acuerdos institucionales se forjan como determinantes para dar un impulso que no hemos tenido.

Aunque la iniciativa del Consejo Empresarial es muy reciente, también es prometedora, especialmente para el desarrollo y crecimiento de Colombia. Es una oportunidad para superar los rezagos tecnológicos, productivos, sociales y económicos que mantenemos por la baja especialización y tecnificación en los procesos. No obstante, es sólo una pequeña oportunidad en donde se hace necesario, de igual manera, la batalla ante la resistencia al cambio de muchos empresarios, para implementar maneras más eficientes de hacer las cosas.

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