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Juan Carlos Cadavid, presidente de Fabricato

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Productos de oriente amenazan la industria textil

Las importaciones de oriente tienen contra las cuerdas a todos los eslabones de la cadena de confecciones, mientras tanto el gobierno sigue abriendo amenazas más grandes como los tratados de libre comercio con Corea y China.

22 de junio de 2012

Todos los actores de la cadena de confección están preocupados por el incremento en las importaciones de las de prendas de vestir, que el año pasado registraron un crecimiento de 64% respecto a 2010 y en el primer trimestre del presente año crecieron 41% comparado con el mismo periodo del año anterior.

Inclusive, los empresarios del sector aseguran que las importaciones subirán considerablemente en el segundo semestre, cuando es más fuerte la dinámica para el sector.

Fuera de eso, algunas materias primas que se están importando y tratados de libre comercio que están en negociación amenazan a los productores nacionales de la principal materia prima, el algodón.

De hecho, una de las empresas que más ha sentido el impacto de la entrada de productos desde el exterior es Fabricato, que el año pasado se vio afectada, entre otras cosas, por los precios del algodón que alcanzaron un récord de US$2,20 dólares la libra cuando normalmente es de 70 centavos de dólar con fluctuaciones de 10 centavos.

La situación es tal, que recientemente la empresa de textiles informó que, con el fin de contar con una planta de trabajadores que atienda los niveles de producción, adelanta las acciones necesarias para lograr una relación óptima entre el número de trabajadores contratados y los niveles de producción requeridos.

Frente al tema, el presidente de Fabricato, Juan Carlos Cadavid, dijo a Dinero.com que está muy pendiente de lo que sucede en el mercado para evaluar cuidadosamente de que porcentaje del personal tendría que prescindir la empresa.

Explica que fuera de la caída en las transacciones, la compañía el año pasado contrato directamente al 50% del personal (3.000 empleados), que antes funcionaba a través de cooperativas, pero eso aumentó la carga en los costos de operación.

“Infortunadamente, en épocas en que la operación no es la que se espera, la única forma de mantener el equilibrio es haciendo reducción de personal”, dice el presidente.

Le atribuye la mala pasada al exceso de importaciones, pero advierte que no es precisamente por los tratados de libre comercio que han entrado en vigencia sino a productos provenientes de oriente: India, China, Pakistán, Camboya, que “son entradas que no corresponden a ningún TLC pero si son producto de reducciones arancelarias que dio el año pasado el gobierno para varios productos de la industria textil desde esos país”, dice el ejecutivo de la compañía.

En la opinión del directivo, el panorama no es optimista debido a que hay un inminente Tratado de Libre Comercio con Corea del Sur desde donde podrían llegar fibras sintéticas que afectarían la industria nacional de materias primas y, además, se insinúa un TLC con China.

En todo caso, Fabricato está explorando oportunidades que podrían concretarse, entendiendo que en casi todos los casos tendrían que ir con aliados estratégicos porque “la explotación de oportunidades del TLC con Estados Unidos se hace con prendas y Fabricato fundamental produce tela”, explica Cadavid.

Adicionalmente, el presidente de la empresa dice que en septiembre concluye el proceso de modernización de la planta, en la cual invirtió cerca de 30 millones de dólares, que le permitirá generar productos de mayor valor y diferenciación.

Sin embargo, Cadavid dice que es necesaria la unidad de todos los eslabones para mantener la competitividad, pues el panorama es opaco en todos los niveles de la cadena.

Argumenta que la industria nacional se ha visto disminuida en el consumo de materias primas, poniendo en aprieto a los algodoneros porque las fábricas han encontrado otras fuentes externas para obtenerlo. Actualmente Fabricato utiliza 40% algodón nacional y 60% importado.