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En 2011 se enviaron un 16,7 por ciento más de giros que en 2010.

Giros

Pese a la crisis, suben las remesas latinas desde España

Lleva un año desempleado, ha agotado su subsidio de desempleo y, sin embargo, sigue enviando dinero a su familia como lo viene haciendo desde hace diez años.

Alianza BBC
10 de agosto de 2011

"Invento la manera, con trabajos sin contrato, bajo cuerda. Allá las cosas no han cambiado mucho y sé que necesitan el dinero", comenta a BBC Mundo el colombiano Mario Aguilar.

Su caso forma parte de un inesperado aumento de remesas en España a pesar de la crisis. Con un 32% de desempleo en la población inmigrante, golpeada por el pinchazo de la burbuja inmobiliaria, las remesas habían protagonizado un descenso crítico durante un par de años. Ahora, vuelven a subir.

Según el último informe del Banco de España en el primer trimestre de 2011 se han enviado un 16,7% más giros que en 2010, unos US$2.640 millones. ¿A qué se debe el aumento?

Nuevas estrategias de gasto
"Muchos inmigrantes se están adaptando a la crisis trabajando en la economía sumergida, algo paradójico si se tiene en cuenta que el Instituto Nacional de Estadística registra una tasa de paro inmigrante del 32%. Las remesas deberían haberse reducido pero aumentan. Eso se explica porque es una población más flexible y necesitada de recursos y está dispuesta a cobrar menos, cambiar de ciudad o trabajar más horas", explica el economista Rafael Pampillón.

El centro de estudios Remesas.org añade otro componente: las remesas aumentan a la par que los sacrificios y renuncias del inmigrante. "La renta global salarial de los inmigrantes no crece pero sí las estrategias de gasto. Los inmigrantes encaran la situación haciendo economías, usando ahorros, o incluso desreagrupando familiares que regresan a sus países de origen", señalan en Remesas.org.

También se renuncia al ocio, a las vacaciones o se venden los coches, si se tienen.

Aguilar, quien ha trabajado en departamentos de mercadeo y marketing, combina una estrategia de economía informal con vivienda compartida y ocio casero.

"Estoy recibiendo el último subsidido de desempleo de Zapatero de unos US$560. Con eso pago los gastos de alquiler del piso que comparto con una amiga. Luego me salen encargos del extranjero -contenidos para webs- y algún proyecto en España que previamente pido que me pagan en negro. Si me doy de alta como autónomo pierdo el subsidio y no me alcanza para pagar la cuota de la Seguridad Social. Sé que no estoy cotizando para la pensión pero espero que vengan tiempos mejores", explica a la BBC.

A su estrategia hay que sumarle un envio mensual de US$150 o US$200 a su madre en Colombia. Lo viene haciendo desde que emigró hace una década. "Últimamente envío un poco más porque estoy ayudándole a montar un negocio", agrega.

"Viajar es un lujo, me conformo con internet"
La ecuatoriana María Vitelma lleva seis años sin ir a ver a sus hijos en su país y, de momento, no lo piensa hacer. "¿Para qué voy a gastar todo ese dinero? Es un lujo. A mis hijos los veo por Internet", comenta a BBC Mundo.

Vitelma trabaja cuidando hijos de inmigrantes. "Soy como una madre adoptiva. Me los traen por la mañana y los recogen por la noche. Los ducho, les pongo la ropa, los llevo al cole", comenta la mujer y luego detalla que muchos padres se quejan de su situación económica. "Están ganando mucho menos de lo que ganaban cuando trabajaban en la construcción, una tercera o cuarta parte (US$850). Ahora trabajan en la economía sumergida, sin contrato. Yo les digo que no se quejen porque ese mismo sueldo en Ecuador es muy difícil de conseguir. Y además aquí tenemos la salud gratis. Una cita para el médico en Quito está costanto unos US$70", agrega.

En su caso ha renunciado a viajar, incluso dentro de España, mientras comparte piso con otros paisanos para ahorrar gastos. Todo para seguir enviando dinero a sus hijos y nietos. "Tengo una nieta con problemas en la espalda. He tenido que ir enviando dinero hasta reunir los US$1.400 que costaba un corsé", explica. Las estrategias económicas también pasan por la ayuda de redes familiares y de nacionalidad. "La gente está aguantando el tirón. Cuesta tanto venir a un país, adaptarse, además muchos tienen sus hijos estudiando aquí. Las condiciones tienen que ser muy extremas para decir me marcho", señala a BBC Mundo el antropólogo Tomás Calvo Buezas.

Envíos todavía vulnerables
A pesar del aumento de las remesas y de la enorme economía sumergida (un 20% según el Banco de España), el Servicio Ejecutivo de Prevención del Blanqueo de Capitales (SEPBLAC) advierte que una parte de esos dineros pueden corresponder al narcotráfico. "Con las remesas se consigue que un movimiento de fondos figure a nombre de un tercero y que la entidad registrada le de cierta legitimidad", apuntan desde la SEPBLAC. "Las organizaciones criminales han optado por atacar el punto más débil del sistema: los agentes (casas de envío). Son ya varios los casos en que las personas físicas ordenantes de los giros se sustituyen por un listado de identidades (ficticias, o falsificadas, o utilizadas sin el consentimiento de su titular). De esta forma es el agente quien confecciona series de giros con ordenantes y beneficiarios ficticios", detallan en el organismo.

Hace menos de un año la SEPBLAC ayudó a desmontar una red de narcotráfico, dentro de la operación Espejo, que había lavado cerca de US$280 millones a través del envío de remesas.